Los fenómenos climáticos extremos son uno de los cinco principales riesgos que podrían frenar el crecimiento económico y obligar a miles de hondureños a emigrar este año tal como ocurrió después de Eta y Iota (2020).
El Informe de Riesgos Globales 2022 (The Global Risks Report 2022), publicado en enero por el Foro Económico Mundial (World Economic Forum), plantea que existe una “preocupación” sobre “el empeoramiento del clima extremo”, factor que, combinado con otros elementos, puede “provocar un aumento en la migración económica” en Honduras, El Salvador, Guatemala, Nicaragua, Armenia y Ucrania.
En ese informe, basado en la Encuesta de Percepción de Riesgos Globales (GRPS), la cual recoge la perspectiva de mil expertos y líderes mundiales, advierte que el cambio climático desplaza directa e indirectamente a la personas y fomenta la “economía de migración”.
Fenómenos meteorológicos frecuentes y extremos (como inundaciones y sequías) podrían desplazar a más de 200 millones de personas entre 2022 y 2050 en diferentes países, como Honduras, según el Foro.
Los cinco riesgos que amenazan a Honduras en 2022 son el colapso del Estado (1), el deterioro de las condiciones de empleo (2), eventos climáticos extremos (3), proliferación de actividades económicas ilícitas (4) y el estancamiento prolongado de la economía (5).
Pronóstico
Francisco Argeñal, director del Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), considerando modelos predictivos internacionales, pronostica un 2022 con escenarios similares a los observados en 1996, 2001, 2012 y 2021.
“En 2012 tuvimos sequía, en 2001 tuvimos sequía. Estamos esperando que termine en mayo la influencia del fenómeno La Niña que está afectando la climatología mundial. Hasta este momento, no podemos decir que este año el país será afectado por El Niño”, le dijo a Diario LA PRENSA.
Entre mayo y junio, advierte Argeñal, habrá una distribución irregular de lluvias, lo cual afectará la agricultura, principalmente el corredor seco del país.
“Sobre la temporada ciclónica, según el modelo de la Universidad de Colorado, tendremos una temporada promedio. Habrá una influencia bastante baja sobre Honduras. Hasta antes de agosto no tendremos grandes amenazas. A finales de abril vamos a actualizar los pronósticos y sabremos sobre lo que puede ocurrir el resto del año”, explicó.
Todos los años, Honduras se ve amenazada por huracanes, tormentas tropicales y depresiones que ocurren entre el primero de junio y 30 de noviembre.
En 2021, el país estuvo a salvo de catástrofes derivadas de estos fenómenos. En 2020, Eta y Iota causaron inundaciones en la costa norte que provocaron daños calculados en L52,099 millones, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Pero en el corredor seco, donde 1.2 millones de personas se encuentran en la fase 3 (crisis) de la Clasificación de Inseguridad Alimentaria por Fases (CIF), de acuerdo con la Oficina de Coordinación Asuntos Humanitarias (Ocha), la producción de granos básicos, frijoles y maíz, principalmente, tuvo un descenso en 2021 debido a la ausencia de lluvias.
“El año pasado hubo baja producción. Por ejemplo, de 1,225,000 quintales de maíz que iba a comprar la industria de las harinas, solo compró más de 725,000. Para este año hay mal augurio, habrá sequía”, dijo Juan Valladares, vicepresidente de la Asociación de Agricultores y Productores de Granos Básicos (Prograno) al ser consultado por Diario LA PRENSA.
Valladares advierte que este Gobierno comenzará la gestión con una “escasez de frijoles y durante el año, si hay sequía, tendrá que enfrentar también escasez de maíz”.
¿Qué es el corredor seco?
“El corredor seco es una franja de territorio que atraviesa Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala. En esta región viven más de 10 millones de personas, muchas de las cuales se dedican a actividades agríolas, en especial a la pequeña producción de granos básicos”. Son afectados por la sequía y escasez de agua para el consumo y cultivos, según la FAO
“El cambio climático afecta al productor, pero este año también hay grandes problemas como el aumento del precio de fertilizantes e insumos, arriba de 150% y 200%. Esto no solo afecta a Honduras, sino a todos los países, lo cual está causado una escasez de alimentos en el mundo”, dijo.
De acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial (OMM), en 2021, la temperatura media mundial superó en aproximadamente 1.11 °C los niveles preindustriales y se convirtió en uno de los siete años más cálidos del período 2015-2021.
Dulio Medina, presidente de Prograno, está seguro que de prevalecer las condiciones climáticas del año pasado “bajará mucho más la producción de granos, habrá alza en los precios y la gente se verá en la necesidad de emigrar”.
“Mucha gente que se dedica a cultivar maíz y frijoles ha hipotecado la casa y propiedades para que sus hijos emigren a Estados Unidos porque aquí no puede producir. Ellos deciden arriesgar en una aventura que no garantiza nada”, dijo.
Medina considera que el Gobierno de Xiomara Castro “puede hacer gestiones en la comunidad internacional para conseguir fondos para financiar sistemas de riego en los valles y garantizar la seguridad alimentaria del país”.
“No podemos continuar dependiente de lluvias. A los productores nos pueden dar sistemas de riego a cambio de desarrollar un programa de reforestación del bosque. Nosotros produciríamos más alimentos y evitaríamos que nuestros agricultores emigren a Estados Unidos donde no todo es fácil”, dijo.
Fondos verdes
En octubre del año pasado, el presidente Juan Orlando Hernández viajó a Glasgow para participar en la cumbre climática COP26 y pedir el acceso a los Fondos Verdes del Clima con los cuales ejecutaría el Plan de Reconstrucción Nacional y Desarrollo Sostenible.
La administración de Hernández prometió que, de obtener esos recursos, los invertiría en la construcción de represas para el control de inundaciones, instalación de sistemas de riego y generación de energía.
No solo Hernández solicitó el año pasado el apoyo internacional, Vinicio Cerezo, secretario del Sistema de Integración Centroamericana (Sica), solicitó a las Naciones Unidas apoyo ante las consecuencias nocivas del cambio climático. Sin embargo, Honduras aún no recibe esa ayuda financiera.
