24/04/2024
05:58 PM

En cayo Bonacca de Guanaja pocos trabajan el sábado

La mayor parte de la población del cayo asiste a la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Su templo no resultó afectado por el incendio del 2 de octubre

Guanaja, Islas de la Bahía.

Las angostas calles del cayo amanecen y permanecen durante el día casi vacías. La mayoría de pulperías, tiendas y otros negocios tienen las puertas cerradas con candado. El sábado son pocos los que trabajan en Bonacca.

Los habitantes del cayo, en su mayoría (más del 70%), reposan religiosamente el sábado porque son partidarios y pregonan la teología cristiana adventista. Una conducta que difiere con el resto del país.

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Los isleños que no descansan en sus hogares, asisten al templo de paredes blancas y escaleras rojas rotulado en inglés con Seventh-Day Adventist Church (Iglesia Adventista del Séptimo Día), la cual quedó incólume después del infernal incendio de la madrugada del pasado 2 de octubre.

La conflagración solo destruyó el techo del edificio que los adventistas tienen contiguo y en el cual funcionaba un club de fitness.

El templo, de dos plantas, con pináculo de madera, se mantiene imponente entre las ruinas ocasionadas por las llamas.

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Mientras los adventistas permanecen congregados en el templo, unos pocos transeúntes y comerciantes que profesan otros credos religiosos se instalan a la orilla de la calle para vender refrescos, jugos o baleadas.

Jesús Manueles, coordinador de emergencias de la Agencia Adventista para el Desarrollo y Recursos Asistenciales (Adra), le dijo a Diario LA PRENSA que “lo que ocurre en este cayo es algo excepcional, el cayo es adventista en su mayoría”.

“Adra, por ser el brazo social de la iglesia, es solidaria con esta comunidad. La estamos apoyando en todo lo que sea necesario y estamos planeando construir algunas viviendas para familias damnificadas”, dijo.

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Los adventistas, entre ellos los de Bonacca, siguen al pie de la letra lo que dicta la Biblia.

El libro de Isaías, capítulo 56, versículo 2, reza que es “dichoso el hombre que sigue estos mandatos y los cumple con fidelidad, que respeta el sábado y no lo profana, que tiene buen cuidado de no hacer nada malo”.

En el versículo 13 del capítulo 58, Isaías insiste: “Respeta el sábado; no te dediques a tus negocios en mi día santo. Considera este día como día de alegría, como día santo del Señor y digno de honor; hónralo no dedicándote a tus asuntos, ni buscando tus intereses y haciendo negocios”.

VIETNAM

Para algunas personas consultadas por Diario LA PRENSA en este incendio “pagaron justos por pecadores”.

“En el barrio Vietnam había muchos problemas. No había paz y hasta vendían droga.

El fuego terminó con eso. En todo esto, también resultamos afectados muchos”, dijo una mujer que pidió reservar su nombre.

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Pero el sábado no todo está cerrado. Permanece abierta la sede de la Policía Nacional de Honduras, el muelle municipal, donde embarcan y desembarcan turistas. Algunos pequeños negocios de comida, donde venden baleadas por no haber otra opción ese día.

Mientras en la isla mayor opera el aeropuerto Harry Hunter, los hoteles y restaurantes que están en los cayos vecinos.