Dos eventos trascendentales han ocurrido en la vida cultural del país. El 27 de agosto de 2025, en el Auditorio del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), el maestro compositor y director de Orquesta Jorge Mejía fue homenajeado por la Universidad Metropolitana al otorgarle el Doctorado Honoris Causa. Acto seguido, la Orquesta Filarmónica de Honduras, acompañada por la Asociación Coral Filarmónica de Honduras con la dirección de Jorge Mejía, presentaron un Concierto de Gala para conmemorar el 20 aniversario de la Orquesta Filarmónica de Honduras. Como es costumbre en sus conciertos, el maestro Mejía presentó un programa variado que incluyó una composición hondureña de Guillermo Anderson, con un arreglo orquestal de Camilo Corea y Jorge Mejía.
Para el desarrollo del programa, el maestro Mejía se hizo acompañar de solistas instrumentales y vocales: el violinista hondureño Mario Zavala, el oboísta panameño Juan Castillo, la soprano Alejandra Alvarado y el tenor Óscar S. Calona, ambos hondureños; y la soprano japonesa Chitosé Shiraishi. El conjunto de ejecutantes de la Filarmónica estaba constituido por músicos que han participado casi desde el comienzo en las labores de la Orquesta y otros que recientemente se incorporaron y aportan frescura y juventud al conjunto.
El concierto arrancó con la nítida interpretación de la Obertura de la ópera La italiana en Argel, de Giachimo Rossini, espectacular compositor de la época romántica de la ópera italiana. Se trata de una melodía alegre y festiva que resume el tono cómico de la obra. Le siguió una Romanza para violín y orquesta. La parte del solista la interpretó con gran precisión Mario Zelaya. Luego vino una obra panameña: Mejorana Mesano, su III movimiento para oboe y orquesta, del compositor Eduardo Charpentier. Se trata de una composición basada en los ritmos y la música propia del folklore de Panamá, que traduce fiesta y alegre ritmo con interpretación al oboe por el músico panameño Juan Castillo.
Siguió la Orquesta interpretando la obra “Mi país”, de Guillermo Anderson, en versión sinfónica, una melodía muy popular, de las muchas que dejó el malogrado compositor.
A continuación, la interpretación del Dúo de las flores, una aria de la ópera Lakmé del francés Leo Delibes. Las voces estuvieron interpretadas por Chitose Shiraishi y Alejandra Alvarado. Es uno de los dúos más famosos del repertorio operístico de todos los tiempos. No podía faltar Ludwig van Beethoven con el I movimiento, allegro con brio, de la popular Quinta Sinfonía. Una de las piezas emblemáticas del legado universal.
El programa concluyó con Pompa y circunstancia, una marcha de Edwards Elgar, y el famosísimo Brindis de la ópera La Traviata, de Verdi, que introdujo el júbilo de los 20 Años de la Orquesta Filarmónica de Honduras.
De Jorge Mejía todos conocemos su brillante trayectoria como compositor, intérprete y director. Solo quiero señalar algunos hitos de su carrera como director: Carmina Burana, la Novena Sinfonía y El Mesías, interpretados por vez primera en Tegucigalpa y que requirieron de gran esfuerzo y trabajo para lograr el éxito logrado. Mejía merece el reconocimiento unánime de los hondureños amantes de la música intelectual.
El segundo evento es el III Encuentro Nacional de Escritores “Dr. Víctor Manuel Ramos”, celebrado en La Esperanza, Intibucá, los días 21 y 22 de agosto.
Se trató de un evento en el que se reunieron muchísimos escritores nacionales para presentar sus obras y promover la lectura a través de una Feria del Libro. Los escritores debatieron sobre los retos que enfrentan los creadores nacionales y plantearon la necesidad de que el Gobierno nacional preste más atención y cooperación a las actividades creativas: la edición e impresión de libros y la compra para la integración de las bibliotecas escolares. Hubo lectura de poesía y narrativa y un simposio sobre los retos de la escritura en Honduras. La actividad final fue el encuentro de los escritores asistentes con alumnos del colegio de Yamaranguila, con quienes se platicó sobre la importancia de la lectura como una manera de fortalecer una conciencia liberadora que permita acciones audaces para asegurar el progreso de la nación.
Yo recibí una hermosa placa que me otorga un reconocimiento especial por parte de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán, la Dirección Departamental de Educación de Intibucá y del Equipo de Gestión Cultural Intibucano. Muchísimas e infinitas gracias.
las columnas de LP
