Desde 1995, el equipo canadiense de hockey sobre hielo, Calgary Hitmen, tiene una tradición muy particular. Tras el primer gol que su equipo marque jugando como local en diciembre, los aficionados deben arrojar peluches a la pista helada. Y eso fue precisamente lo que hicieron los aficionados, cuando anotó Jordy Stallard, a los dos minutos del segundo tiempo.
Los aficionados convirtieron el campo de juego del estadio Scotiabank Saddledome, en una 'lluvia'de juguetes al arrojar 28,815 peluches, cumpliendo así con la costumbre conocida como 'Teddy Bear Toss'.
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Los peluches serán donados a 50 organizaciones benéficas que se encargarán de repartirlos a los niños más necesitados durante la víspera de Navidad.
 Los jugadores tuvieron tiempo para tomarse fotografías con la gran cantidad de peluches donados. Foto cortesía de #TeddyBearToss #teddyconfettiyyc.
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Según la leyenda, todo comenzó en Florida, Estados Unidos, cuando Scott Mellanby, jugador de los Florida Panthers, encontró una rata en el vestuario y la mató con su palo de hockey. A partir de ese momento, el público empezó a tirar ratas de plástico para ensuciar el hielo.
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Con el tiempo la tradición se fue propagando y mutando, hasta llegar a Canadá y convertirse en un acto de solidaridad que lleva alegría a los que más necesidades tienen. Mira el video.
