El papa Benedicto XVI presidió ayer por la noche en el Coliseo de Roma el tradicional Vía crucis que conmemora el calvario de Cristo hasta su crucifixión y que este año será dedicado a la violencia, los secuestros, la corrupción y los conflictos en el mundo.
El Papa, que cumplirá 82 años el 16 de abril, encabeza como espectador desde la colina del Palatino buena parte del vía crucis, sin recorrer a pie las 14 estaciones, como ocurrió el año pasado. La ceremonia duró unas tres horas.
'No todo está perdido en los momentos de dificultad', anunció el arzobispo de India, Thomas Menamparampil, autor de las reflexiones.
'La historia está llena de odio y de violencia. También hoy en día somos testigos de violencias increíbles: homicidios, violencia contra las mujeres y niños, secuestros, extorsiones, conflictos étnicos, violencia urbana, torturas físicas y mentales así como violaciones de los derechos humanos', denuncia en las meditaciones que acompañan cada estación.
El religioso salesiano, arzobispo de Guwahati, cita personajes como Madre Teresa de Calcuta, Mahatma Gandhi, Shakespeare o Dante Alighieri y hace referencias a catástrofes como el tsumani o la bomba atómica, según el texto divulgado con anticipación por el Vaticano.
El Papa dijo al término de la ceremonia: 'Oramos para que se produzca la luz de la esperanza'.
Benedicto XVI se unió a la procesión al final, mientras la cruz fue cargada en las 14 estaciones del calvario padecido por Cristo por un joven minusválido, una familia romana, un enfermo y un voluntario de una asociación humanitaria. La mayor parte de la ceremonia fue oficiada por el cardenal italiano Agostino Vallini, vicario de Roma.
El sábado por la noche, el Papa regresará a la basílica de San Pedro para la velada pascual antes de la misa de Pascua del domingo y la tradicional bendición 'urbi et orbi'.
Mientras, en casi todos los países de América se recordó la muerte de Jesús.
Vestidos de rigurosa indumentaria negra, miles de guatemaltecos cargaron en hombros la imagen del Cristo Yacente, en una de las procesiones más coloridas y de mayor tradición de la Semana Santa en Guatemala.
La solemnidad con que transcurre la procesión del Santo Entierro contrastaba con las coloridas alfombras que marcan el paso del recorrido por las calles de la capital guatemalteca.
Peregrinos en procesión
Jerusalén. Miles de peregrinos católicos del mundo entero participaron en la tradicional procesión del Viernes Santo en la Ciudad Vieja de Jerusalén que conmemora la crucifixión de Jesús, dos días antes de la Pascua.
Los fieles siguieron las 14 estaciones de la Vía Dolorosa, el camino de la cruz que Jesús recorrió antes de ser crucificado por los romanos, de acuerdo con la tradición cristiana. Bajo un sol radiante, los cristianos, algunos de los cuales llevaban cruces para recordar el calvario de Cristo, cruzaban en su camino en la Ciudad Santa a musulmanes que se dirigían a la Explanada de las Mezquitas y a judíos que iban a orar al Muro de los Lamentos.
La procesión comenzó ante el convento de la Flagelación y terminó en el Santo Sepulcro, considerado por la mayoría de los cristianos como el lugar de sepultura de Jesús. Este sitio sagrado para el cristianos se encuentra en la Ciudad Vieja de Jerusalén.
Otros países
El Salvador. Las calles por donde pasan las procesiones del Santo Entierro fueron cubiertas con coloridas alfombras elaboradas por artesanos.
En México, dos millones de personas asistirán a La Pasión en Iztapalapa, culminará en el predio La Pasión, donde Jesús será colocado en la cruz.