Washington, Estados Unidos.
La fiscal general de Estados Unidos, Loretta Lynch, definió la recaptura de Joaquín el Chapo Guzmán como “una victoria para los ciudadanos de México y de Estados Unidos, y una reivindicación del Estado de derecho en ambos países”.
En un comunicado, Lynch dijo que “Guzmán ahora tendrá que responder por sus presuntos crímenes” y felicitó al Gobierno de México; pero no se refirió de manera directa al espinoso asunto de la extradición.
Peter Carr, vocero del Departamento de Justicia de EUA, declaró que el Gobierno estadounidense no suele comentar sobre las peticiones de extradición antes de que se conviertan en procedimientos judiciales públicos.
Muchos legisladores estadounidenses, en su mayoría republicanos, habían insistido en la necesidad de presionar a México para que extraditara al Chapo si era capturado de nuevo. Ayer el senador y precandidato republicano a la Casa Blanca Marco Rubio volvió a subrayar esa idea. “Teniendo en cuenta que ya se escapó de una prisión mexicana dos veces, no podemos desperdiciar esta tercera oportunidad de llevarlo ante la Justicia”, aseguró Rubio en un comunicado.
El perfil del Chapo es tan notorio en Estados Unidos que la DEA lo incluyó el pasado 16 de julio en su lista de fugitivos y las autoridades habían ofrecido por información que llevara a su captura una recompensa de cinco millones de dólares.
Los medios internacionales también hicieron eco del ‘gran logro’ del Gobierno de Enrique Peña Nieto.
En Estados Unidos, los diarios The New York Times y el Washington Post resaltaron el hecho, al igual que el diario francés Le Monde.
“La captura del narcotraficante prófugo concluye un capítulo profundamente vergonzoso para México”, indicó el New York Times.
En Europa, el diario español El País se refirió en su portada a Guzmán Loera como “el narcotraficante más buscado del mundo” y elogió su recaptura.
La fiscal general de Estados Unidos, Loretta Lynch, definió la recaptura de Joaquín el Chapo Guzmán como “una victoria para los ciudadanos de México y de Estados Unidos, y una reivindicación del Estado de derecho en ambos países”.
En un comunicado, Lynch dijo que “Guzmán ahora tendrá que responder por sus presuntos crímenes” y felicitó al Gobierno de México; pero no se refirió de manera directa al espinoso asunto de la extradición.
Peter Carr, vocero del Departamento de Justicia de EUA, declaró que el Gobierno estadounidense no suele comentar sobre las peticiones de extradición antes de que se conviertan en procedimientos judiciales públicos.
Muchos legisladores estadounidenses, en su mayoría republicanos, habían insistido en la necesidad de presionar a México para que extraditara al Chapo si era capturado de nuevo. Ayer el senador y precandidato republicano a la Casa Blanca Marco Rubio volvió a subrayar esa idea. “Teniendo en cuenta que ya se escapó de una prisión mexicana dos veces, no podemos desperdiciar esta tercera oportunidad de llevarlo ante la Justicia”, aseguró Rubio en un comunicado.
El perfil del Chapo es tan notorio en Estados Unidos que la DEA lo incluyó el pasado 16 de julio en su lista de fugitivos y las autoridades habían ofrecido por información que llevara a su captura una recompensa de cinco millones de dólares.
Los medios internacionales también hicieron eco del ‘gran logro’ del Gobierno de Enrique Peña Nieto.
En Estados Unidos, los diarios The New York Times y el Washington Post resaltaron el hecho, al igual que el diario francés Le Monde.
“La captura del narcotraficante prófugo concluye un capítulo profundamente vergonzoso para México”, indicó el New York Times.
En Europa, el diario español El País se refirió en su portada a Guzmán Loera como “el narcotraficante más buscado del mundo” y elogió su recaptura.
