Washington, Estados Unidos.
Varios congresistas demócratas arremetieron ayer contra el presidente estadounidense Donald Trump, luego de que despidiera a Preet Bharara, reconocido fiscal federal del Distrito Sur de Nueva York, adonde se llevan a cabo los juicios contra los ciudadanos hondureños Fabio Lobo, Yani y Yankel Rosenthal.
El líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer, manifestó su sorpresa tras la confirmación del despido de Bharara, un fiscal que ha llevado a la cárcel a varios banqueros y también a destacados políticos de Nueva York por casos de corrupción.
“Estoy extremadamente sorprendido y decepcionado” dijo Schumer. “La decisión del Presidente de cambiar su opinión y despedir a Preet dice más del mandatario que de Preet”, agregó.
La senadora demócrata Elizabeth Warren también criticó al Presidente y dejó entrever que el despido de Bharara se debió a que el fiscal tenía autoridad sobre los negocios de Trump en Nueva York.
“Preet Bharara tenía autoridad sobre la torre Trump. El Presidente lo llamó directamente, rompiendo el protocolo. 24 horas después le pidió que renunciara”, escribió Warren en Twitter.
En efecto, Bharara rechazó mantener una conversación telefónica con el presidente Trump, dos días antes de ser despedido, informaron ayervarios medios.
Según The New York Times, la oficina de Trump telefoneó a la de Bharara el pasado jueves, pidiendo al fiscal que llamara al Presidente.
Protocolo
Bharara, según el Times, contactó entonces con el Departamento de Justicia para informar de la llamada y para explicar que no iba a devolverla en cumplimiento de los protocolos que limitan los contactos entre fiscales y el Ejecutivo.
Por ahora, se desconoce el mensaje que Trump quería trasladar al fiscal.
Un día después, el Gobierno solicitó la dimisión a 46 fiscales federales nombrados por la anterior Administración, los últimos que quedaban en sus cargos.
En el caso de Bharara, la decisión fue una sorpresa, dado que el pasado noviembre Trump le había pedido que continuara en el puesto y él había aceptado.
Varios congresistas demócratas arremetieron ayer contra el presidente estadounidense Donald Trump, luego de que despidiera a Preet Bharara, reconocido fiscal federal del Distrito Sur de Nueva York, adonde se llevan a cabo los juicios contra los ciudadanos hondureños Fabio Lobo, Yani y Yankel Rosenthal.
El líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer, manifestó su sorpresa tras la confirmación del despido de Bharara, un fiscal que ha llevado a la cárcel a varios banqueros y también a destacados políticos de Nueva York por casos de corrupción.
“Estoy extremadamente sorprendido y decepcionado” dijo Schumer. “La decisión del Presidente de cambiar su opinión y despedir a Preet dice más del mandatario que de Preet”, agregó.
La senadora demócrata Elizabeth Warren también criticó al Presidente y dejó entrever que el despido de Bharara se debió a que el fiscal tenía autoridad sobre los negocios de Trump en Nueva York.
“Preet Bharara tenía autoridad sobre la torre Trump. El Presidente lo llamó directamente, rompiendo el protocolo. 24 horas después le pidió que renunciara”, escribió Warren en Twitter.
En efecto, Bharara rechazó mantener una conversación telefónica con el presidente Trump, dos días antes de ser despedido, informaron ayervarios medios.
Según The New York Times, la oficina de Trump telefoneó a la de Bharara el pasado jueves, pidiendo al fiscal que llamara al Presidente.
Protocolo
Bharara, según el Times, contactó entonces con el Departamento de Justicia para informar de la llamada y para explicar que no iba a devolverla en cumplimiento de los protocolos que limitan los contactos entre fiscales y el Ejecutivo.
Por ahora, se desconoce el mensaje que Trump quería trasladar al fiscal.
Un día después, el Gobierno solicitó la dimisión a 46 fiscales federales nombrados por la anterior Administración, los últimos que quedaban en sus cargos.
En el caso de Bharara, la decisión fue una sorpresa, dado que el pasado noviembre Trump le había pedido que continuara en el puesto y él había aceptado.
