El Gobierno de Justin Trudeau se ha caracterizado por su política de puertas abiertas para los inmigrantes y refugiados y ahora abre una nueva vía a la ciudadanía para los indocumentados que laboren en construcción.
La ciudad de Ottawa lanzó un programa para beneficiar hasta un millón de trabajadores cualificados. “Es un proyecto muy pequeño para nosotros, pero es muy importante ponerlo en marcha”, explicó Hassan Yussuff, responsable del programa piloto que ofrecerá la ciudadanía inicialmente a 500 obreros y a sus familias.
“Algunos llevan aquí más de cinco años, y sus familias han echado raíces en este país, tenemos que encontrar la manera de solventar su estatus”, agregó Yussuff, citado por el diario Toronto Star.
Según un estudio del Build Force Canada, Ontario necesitará 26,100 trabajadores de la construcción en la próxima década.
Para ser elegible para el programa piloto, los aplicantes deben cumplir los siguientes requisitos:
-Tener la habilidad de sostener conversaciones en inglés o francés.
-Haber ingresado a Canadá como empleado temporal y haber residido en el país por los últimos cinco años.
-Pagar sus impuestos en Canadá.
-Tener un familiar que sea ciudadano canadiense o residente permanente.
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En enero pasado, el Congreso canadiense anunció un plan para conceder la residencia permanente a más un millón de inmigrantes durante los próximos tres años.
Las autoridades migratorias de ese país afirmaron que muchos trabajadores indocumentados llegan a Canadá con un permiso temporal para llenar plazas en la industria de la construcción y que se quedaron en el país ilegalmente.
'Sin un estatus migratorio, estos empleados y sus familias han vivido con temor y vulnerables a la explotación y abusos. Esta iniciativa temporal es un paso adelante para aumentar la protección a algunos de estos trabajadores y sus familias', agregó el portavoz.
