“Cuatro municipios de Ocotepeque estamos en una verdadera emergencia desde el 25 de septiembre, las lluvias no cesan y cada vez nos dejan más daños. Estamos incomunicados”.
Así se expresó el alcalde de La Encarnación, Orlando Santos, quien desde ayer tuvo reuniones con sus homólogos de municipios vecinos para declararse en emergencia municipal.
Desde el pasado domingo, fuertes lluvias han azotado el occidente del país y han dejado completamente los daños en los puentes que comunican los referidos municipios y en otras vías de comunicación.
El puente sobre el río Jocomico, que pasa por el centro de La Encarnación, fue arrastrado por las fuertes corrientes de agua la noche del martes. Esto agudizó la situación que aún no ha podido ser superada.
Informes preliminares señalan que el río derribó una de las bases del centro del puente, lo cual hizo caer al menos 30 metros lineales e incomunicó las comunidades de El Matasano, Las Mesitas, El Pacayal y el barrio Santa Catarina de La Encarnación.
En la comunidad de El Naranjo, en La Encarnación, el desbordamiento de tres quebradas cortó el paso de vehículos y peatones.
La carretera de tierra que une a La Encarnación con Lucerna tiene deslizamientos que han interrumpido por completo el paso.
Dicha vía de acceso comunica a San Jorge, San Fernando y La Encarnación con el resto del país, es decir, por ella entran todos los víveres y sale la producción de los municipios.
Ocho mil habitantes de San Jorge están atrapados, ya que su única vía de acceso es por donde estaba el puente que se cayó.
Emergencia
Los daños y pérdidas son incontables. Los cuatro municipios tienen problemas de agua potable y energía eléctrica; advierten que en caso de que siga lloviendo y no se haga nada para mejorar las vías, en pocos días no habrá alimentos, advirtió el alcalde Orlando Santos.
El alcalde de Lucerna, Obdulio Mercado, aseguró que el casco urbano y cuatro aldeas del municipio no tienen agua potable desde el domingo.
Tragedia
Las fuertes lluvias no solo han dejado destrozos en Ocotepeque, también han cobrado la vida de un caficultor de Lucerna.
Según el jefe edilicio Obdulio Mercado, la noche del miércoles murió el caficultor Ovidio Pérez (35).
Testigos afirmaron que Pérez se encontraba con su hijo en una finca en La Danta, Lucerna, haciendo labores cotidianas. Cuando las lluvias arreciaron, parte del cerro en que estaban les cayó encima y dejó a padre e hijo completamente soterrados.
Afortunadamente, el jovencito salió de debajo de la tierra y alertó a la población para darle ayuda al caficultor, pero cuando lo encontraron ya había perecido.
Declaran alerta amarilla en Ocotepeque
Alerta amarilla por 48 horas a partir delas 3:00 pm de ayer Ver más noticias sobre Honduras
