San Pedro Sula, Honduras.
Un 2% se ha reducido en Honduras el trabajo infantil, según los cálculos de la Secretaría de Educación.
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) asegura que unos 380,000 niños son trabajadores infantiles y otros 300,000 están fuera de las escuelas, por lo que se considera que la deserción escolar está altamente vinculada con el trabajo infantil.
Según el ministro de Educación, Marlon Escoto, las medidas tomadas en el último año con la jornada extendida y la promoción de estudiantes de primer grado a segundo han logrado esta corta pero significativa disminución en los escolares que trabajan.
“La mayoría de niños que reprobaban en primer grado no regresaban a la escuela y sus padres al ver un fracaso de sus hijos decidían dejarlos trabajando o cuidando a sus demás hermanos en la casa, adonde finalmente eran sometidos al analfabetismo y ahora eso de alguna medida se ha mejorado; aunque todavía hay trabajo por resolver”, dijo el ministro.
Por otra parte, el titular de Educación destacó que con la jornada extendida se logró retener a los menores en el centro educativo y no hubo más deserción. Según autoridades departamentales de Educación, el trabajo infantil también disminuyó en San Pedro Sula. Aunque todavía hay menores que ayudan a sus padres en los negocios, estos se han vuelto más responsables y los envían a la escuela.
Un 2% se ha reducido en Honduras el trabajo infantil, según los cálculos de la Secretaría de Educación.
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) asegura que unos 380,000 niños son trabajadores infantiles y otros 300,000 están fuera de las escuelas, por lo que se considera que la deserción escolar está altamente vinculada con el trabajo infantil.
Según el ministro de Educación, Marlon Escoto, las medidas tomadas en el último año con la jornada extendida y la promoción de estudiantes de primer grado a segundo han logrado esta corta pero significativa disminución en los escolares que trabajan.
“La mayoría de niños que reprobaban en primer grado no regresaban a la escuela y sus padres al ver un fracaso de sus hijos decidían dejarlos trabajando o cuidando a sus demás hermanos en la casa, adonde finalmente eran sometidos al analfabetismo y ahora eso de alguna medida se ha mejorado; aunque todavía hay trabajo por resolver”, dijo el ministro.
Por otra parte, el titular de Educación destacó que con la jornada extendida se logró retener a los menores en el centro educativo y no hubo más deserción. Según autoridades departamentales de Educación, el trabajo infantil también disminuyó en San Pedro Sula. Aunque todavía hay menores que ayudan a sus padres en los negocios, estos se han vuelto más responsables y los envían a la escuela.
