La cancelación de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid, por sus siglas en inglés), anunciada por la administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien la describe como una “organización criminal”, dejará a varias naciones sin apoyo financiero.
La agencia de noticias Efe informó que lo que comenzó como una medida temporal de noventa días para “reducir el gasto público y la burocracia, reevaluar la eficacia de los programas y prevenir el posible uso indebido de los fondos” se ha transformado en una situación incierta para Usaid, una entidad que “ha llegado el momento de que muera”, según el magnate Elon Musk, responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental de Estados Unidos.
Aunque un juez federal bloqueó temporalmente la decisión el viernes pasado, Trump planea reducir su personal de 10,000 a solo 290 puestos, que son considerados “esenciales”, según The New York Times.
Expertos dicen que esa decisión para Honduras traerá serias repercusiones en varios sectores que durante años han recibido apoyo de la agencia.
La agencia invirtió más de 443.2 millones de dólares en Honduras entre 2022 y 2024 en 430 actividades, incluyendo desarrollo económico, gobernanza, educación, salud y seguridad alimentaria.
También financió cursos, investigaciones, alivio de deuda y apoyo a organizaciones internacionales.
Honduras, a través de Usaid, recibió el año pasado más de 152 millones de dólares, fondos que fueron dirigidos a obras de infraestructura, proyectos de impulso a los productores agrícolas, desarrollo de programas de emprendimiento, entre otros.
Según datos oficiales del Gobierno de Estados Unidos, en 2024 Usaid distribuyó más de 44,000 millones de dólares en ayuda global. De esta suma, alrededor de 2.300 millones de dólares fueron dirigidos a iniciativas en América Latina, representando un pilar fundamental para diversos programas.
Octavio Pineda, titular de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT), explicó que el Fondo Hondureño de Inversión Social (FHIS) desarrolla con apoyo de la agencia dos programas importantes en el occidente del país, de los cuales se derivan las 28 obras que todavía no se concluyen. La cancelación de la agencia representa un impacto negativo en la ejecución de las obras.
En el área de agricultura, la agencia desarrolló proyectos que buscaban impulsar el desarrollo del país a través de iniciativas como “Agronegocios sostenibles”.
El proyecto tenía por objetivo mejorar la productividad, identificar oportunidades económicas para la creación de más y mejores empleos de los productores agrícolas.
Democracia y gobernanza
Durante años, Usaid desarrolló en Honduras diversos proyectos enfocados en democracia, derechos humanos y gobernanza. Entre 2022 y 2024, invirtió 129.66 millones de dólares, con 57.33 millones destinados en 2024, la mayor inversión del período.
En este sector, se ejecutaron 57 proyectos, muchos orientados a fortalecer la rendición de cuentas, la transparencia, el combate a la corrupción y la promoción de la participación ciudadana.
Recientemente, Cossette López, presidenta del Consejo Nacional Electoral, informó que Estados Unidos suspendió ayuda para “un consultor tecnológico y para registro de custodios, pero esperamos poder solventarlo”.
Organizaciones de sociedad civil como el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) tuvieron financiamiento de Usaid; hasta 2023 el CNA recibió 31,454,486.89 lempiras como donación para la ejecución de las actividades; eso representó el 52% de los ingresos totales del CNA.
La agencia también financió proyectos de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ); en 2023, en su informe de estado financiero, la organización señala que firmó con la agencia contratos para la ejecución de dos programas.
El primero es el proyecto “Sembrando esperanza” con un monto de 111,951 dólares; el segundo proyecto fue el proyecto “Asistencia técnica para mejorar los servicios de reintegración de migrantes y personas desplazadas internamente” por 77,636.40 dólares.
Otras organizaciones como el Foro Social de la Deuda Externa en Honduras (Fosdeh) también recibieron apoyo de la agencia estadounidense en algunas investigaciones que desarrolló.
De acuerdo a la página web del Departamento de Estado de los Estados Unidos (DOS, por sus siglas en inglés), “el apoyo de Usaid a la sociedad civil para promover la transparencia y la lucha contra la corrupción contribuyó a más de 150 investigaciones de corrupción y expuso 430 millones de dólares en fondos potencialmente malversados”.
Otros sectores
La agencia trabaja en temas de migración, salud, educación, paz y seguridad. Fueron más de 200 centros educativos que el gobierno estadounidense ayudó a reconstruir a la Secretaría de Educación durante 2024.
Uno de los mayores apoyos de Usaid a Honduras fue de asistencia humanitaria, especialmente durante los desastres naturales.
Durante el reciente paso de la tormenta tropical Sara en noviembre pasado, que dejó a más de 240,000 ciudadanos afectados en la zona norte, Usaid dio 20 millones de dólares para ayudar a los afectados.
Elsy Reyes, titular de la Defensoría de Movilidad Humana, del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), dijo que la suspensión de la cooperación de Estados Unidos dejará un vacío preocupante en varias áreas.
“Muchos sectores que dependen de estos programas, como niñez, mujeres, personas LGBTQ+, y los migrantes retornados, se verán gravemente afectados. Usaid ha trabajado durante años en procesos de reintegración y capacitación laboral, apoyando a quienes más lo necesitan”, expresó.
Las organizaciones en Honduras que brindaban los servicios financiados por Usaid ya han notificado su incapacidad para continuar con sus actividades debido a la falta de recursos; eso no solo trae afectaciones a los beneficiados, también aumenta el desempleo.
Según el analista Luis León, la cancelación de fondos de parte de Usaid para el desarrollo de programas sociales afecta en la pérdida de unos 15,000 empleos.
En México, la presidenta Claudia Sheinbaum ha celebrado la suspensión de la ayuda al considerar que ha financiado a grupos opositores, pero organizaciones que apoyan a migrantes, mujeres y personas LGBTI alertan del riesgo de desaparecer.