04/12/2025
07:10 AM

Rechazan intención del Gobierno de retirar base militar de USA

Salvador Nasralla señaló que el gobierno de Xiomara Castro estaría contemplando entregar esta base a China, lo que considera una amenaza para el país.

Tegucigalpa, Honduras

El precandidato presidencial por el Partido Liberal, Salvador Nasralla, expresó su preocupación sobre la posible expulsión de la base militar de Palmerola, ubicada en Honduras, como una represalia del gobierno de Xiomara Castro ante posibles políticas migratorias más firmes por parte de Estados Unidos. Nasralla advirtió que esta decisión podría “romper relaciones con EE. UU., nuestro principal socio estratégico” y, además, “poner en riesgo nuestra estabilidad regional”.

El precandidato también señaló que el gobierno estaría contemplando entregar esta base a China, lo que considera una amenaza para el país.

La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, advirtió este miércoles que si el Gobierno del presidente electo de EE.UU., Donald Trump, hace una deportación masiva de hondureños la base militar estadounidense en territorio hondureño no tendría razón de existir.

“Frente a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos, tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar, en el que sin pagar un centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”, dijo Castro en un mensaje en cadena nacional de radio y televisión dirigido a sus compatriotas con ocasión del nuevo año.

Nasralla también destacó las posibles repercusiones económicas de una medida de este tipo. “Un conflicto de esta magnitud abriría la puerta a aranceles devastadores para nuestras exportaciones, golpeando de lleno a nuestra ya frágil economía y dejando a miles de hondureños sin sustento”, afirmó.

El precandidato subrayó que Honduras necesita “aliados, no confrontaciones absurdas”, y recordó que la cooperación con EE. UU. ha sido fundamental para el empleo, el comercio y el desarrollo del país. Finalmente, hizo un llamado urgente a la reflexión: “¡Basta de decisiones que traicionan al pueblo! Pensemos en Honduras, no en agendas externas.”

Derogar el convenio

Asimismo, el diputado nacionalista Tomás Zambrano criticó las acciones del partido Libre, que según él, continúa con una agenda “radical y de polarización”. Zambrano hizo referencia a los recientes ataques de Libre al gobierno de EE. UU. del presidente Donald Trump, señalando que el partido “amenazó con eliminar la base de Palmerola en Honduras”.

Honduras buscará fortalecer relaciones con EUA

El legislador dejó claro que la bancada del Partido Nacional no apoyará esa propuesta, ya que, según explicó, “para derogar el convenio se ocupa el Congreso Nacional”.

Zambrano destacó que el camino para detener las deportaciones debe ser a través del “diálogo y consensos”. También enfatizó que la bancada nacionalista considera que “quienes se van son los de Libre en 10 meses y 29 días”, haciendo referencia a las próximas elecciones.

Deportación masiva de inmigrantes

Estados Unidos mantiene una base en Palmerola, en el centro de Honduras, que construyó a inicios del decenio de 1980 y en la que permanecen unos 400 militares.

Miles de hondureños dejan una huella positiva alrededor del mundo

La base le sirvió a EE.UU. para sus operaciones contra el comunismo en Centroamérica en plena guerra fría.

Trump prometió desde la campaña una deportación masiva de inmigrantes ilegales que comenzaría el próximo 20 de enero, cuando empieza el nuevo Gobierno estadounidense, como ya aseguró Tom Homan, considerado el ‘zar de la frontera’ de la nueva Administración.

Castro indicó este miércoles que espera que el nuevo Gobierno de Trump “sea abierto al diálogo constructivo y amistoso, que no tome represalias innecesarias contra nuestros migrantes que por norma hacen un gran aporte a la economía norteamericana”.

Según autoridades de Tegucigalpa, más de un millón de hondureños, entre residentes legales e indocumentados, viven en Estados Unidos, y 280.000 nacionales están en lista de deportación.

Las remesas familiares que envían los emigrantes hondureños representan alrededor del 25 % del producto interno bruto (PIB) de Honduras. El 90 % de ellas proceden de EE.UU. y se han constituido en uno de los principales sustentos de muchas familias hondureñas.

Xiomara Castro anunció además que como presidenta pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), junto a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, convocarán este enero a una reunión de cancilleres con el fin de abordar el tema de la migración.

La reunión, de la que no precisó si será con todos los cancilleres de los países de la Celac, también será para “apoyar a la hermana República de Haití y manifestar nuestra solidaridad con el pueblo y el Gobierno de Cuba”, subrayó la presidenta hondureña.