San Pedro Sula, Honduras.
Los pronóstico sociales y económicos para Honduras después de la crisis provocada por la pandemia del COVID-19 no son nada alentadores, según expertos y organizaciones internacionales.
Uno de los impactos más graves para la economía del país es la caída del ingreso de las remesas familiares. El Banco Mundial en su informe La economía en los tiempos del COVID-19 estima que el flujo de remesas a nivel mundial caerá un 20%.
“Se espera que Honduras entre en recesión en 2020 debido a la epidemia de COVID-19, lo que conducirá a un aumento de la pobreza y la desigualdad a medida que disminuyan las remesas, y los más vulnerables pierdan sus ingresos”, detalla en el informe el Banco Mundial.
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3 Claves de las remesas
1. Población
Según el Banco Interamericano de Desarrollo, 1 de cada 6 hondureños se beneficia de las remesas internacionales, donde el 68% de los receptores en son mujeres y el 83% de los hogares que se benefician son pobres o en riesgo de caer en la pobreza.
2. Ingresos
La proporción en los ingresos en los hogares receptores presenta el 38%. Esto aumenta en hogares rurales, hogares encabezadas por mujeres y hogares en los que el jefe del hogar es un adolescente. Las hogares encabezados por mujeres reciben 58% más de remesas.
3. Gasto
El 80% de los hogares receptores de remesas reportan usar los envíos para cubrir gastos diarios de consumo. Según el BID, dos de cada cinco hogares que reciben remesas también reportan usarlos también para cubrir gastos médicos de los hogares
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Importancia: Flujo de remesas en Honduras / El 44% de los hogares de Honduras que reciben remesas son pobres.En la imagen, una de las zonas más pobres de San Pedro Sula.
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Sin embargo, para la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), las remesas familiares caerán hasta 33% en Honduras en 2020. Si se toma en cuenta que las remesas cerraron en 2019 en 5,480 millones de dólares según el Banco Central de Honduras (BCH), se habla de que la economía dejará de recibir 1,808.4 millones de dólares (L45,210 millones).
Pedro Barquero, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), explica que en Estados Unidos se han perdido 30 millones de puestos de trabajo y llegará hasta los 50 millones a causa del coronavirus. Barquero señaló que según las estimaciones del Gobierno de EEUU la tasa de desempleo pasará del 3 al 32%, por lo tanto, muchos hondureños perderán sus empleos y el envío de remesas bajará entre el 20% y 30%.
Hugo Noé Pino, expresidente del BCH, estima que la caída de remesas puede estar entre el 10% y 20%, que significará entre 500 y 1,000 millones de dólares. Resalta que la reducción dependerá de la recesión de Estados Unidos. “Sabemos que los trabajos generalmente adonde están colocados los hondureños son restaurantes, servicios de limpieza en hoteles y casas particulares, y esto ha tenido una merma importante a raíz del coronavirus”, explica.
Según el Banco Mundial, Honduras promedia una tasa del 19.6% de pobreza extrema en su población. El Banco Central de Honduras informó que debido a la paralización de labores en EUA el ingreso de remesas se redujo en 230 millones de dólares.
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Ismael Zepeda, economista del Foro Social de Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh), dice que esto afectará directamente a las familias que reciben remesas y también al Estado porque dejará de circular el dinero.
Zepeda explica que las remeses benefician al Estado gracias a que hay más consumo, y obtiene recursos a través del impuestos sobre venta y el pago de servicios públicos.
20 %
del PIB representan las remesas familiares en la economía de Honduras, la tercera más elevada de Latinoamérica.
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Canasta básica.
Luis Alberto Guifarro, presidente del Colegio Hondureño de Economistas (CHE), manifiesta que los primeros efectos de la caída de las remesas ya se están observando a través del deslizamiento de la moneda, que en abril se depreció 6 centavos frente al dólar y en lo que va del año lo ha hecho en 38 centavos, el doble que lo observado durante el mismo período de en 2019.
“Puede que la caída del flujo de remesas esté provocando que el nivel de reservas del país presente una tendencia a la baja; por lo tanto, cuando esto sucede se mueve el tipo de cambio para provocar algunos desestímulos o presionar el consumo de bienes importados, porque a medida que se eleva el tipo de cambio, los bienes que importamos son más caros”, dice el economista.
2.3%
del PIB será la recesión que tendrá la economía de Honduras, según las estimaciones del Banco Mundial.
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Guifarro explica que la estabilidad del sector externo de la economía hondureña lo determina el flujo de remesas, por lo que si las remesas caen, el sector externo se vuelve vulnerable.
Para el presidente del CHE, el efecto de la caída de la remesas en el tipo de cambio perjudica el bolsillo de los hondureños, ya que se va a encarecer el precio de la canasta básica la que entre el 50 y el 60% es de bienes importados y donde el 80% de la producción en el país se realiza a través de bienes importados.
Según cifras del BCH, las remesas representaron el 44% de 12,469.4 millones de dólares en divisas que ingresaron en el país en 2019.
Ismael Zepeda dice que será necesario desarrollar un plan para mitigar el impacto que producirá la caída en el flujo de remesas, sobre todo por los ingresos que dejarán de tener los hogares más pobres.
Para el economista, se necesita “generación masiva de empleos, fortalecimiento del sector productivo exportador porque se pueden caer las reservas internacionales”.
El Banco Mundial señala que la economía de Honduras se recuperará hasta en 2021 con el apoyo de un fuerte impulso fiscal, la reanudación del comercio y la confianza de los inversores.
La Secretaría de Integración Económica Centroamericana (Sieca) indica que “dada la importancia del mantenimiento de flujo de remesas en la región, la adopción más rápida de servicios financieros digitales que permiten reducir los costos de las remesas y aumentar su conveniencia debería ser una prioridad una vez que la crisis sanitaria se estabilice”, detalló en un informe la Sieca.