Las máximas autoridades de la Policía sostuvieron una reunión de emergencia esta mañana para verificar las condiciones en que se está desarrollando el paro nacional de transporte público y posibles acciones para contrarrestar en caso de no acabarse pronto.
Los altos mandos de la institución estuvieron monitoreando al interior de una sala los medios de comunicación, las cámaras del 911 y las radiopatrullas metropolitanas geolocalizadas a nivel nacional.
El objetivo fue analizar los puntos críticos que forman parte de este paro de transporte público, al tiempo que enlazaron comunicación con las máximas autoridades de las Fuerzas Armadas de Honduras para determinar qué acciones se tomarán.
El director de la Policía Nacional, Gustavo Sánchez, manifestó que “la disposición de los transportistas es bloquear los pasos y llamar la atención, pero si no finalizan el paro nacional después del mediodía, entonces utilizaremos los recursos que la ley autoriza”.
El jefe policial indicó que desde temprano han realizado desalojos a través del diálogo y la prensencia policial, logrando la liberación completa y parcial en determinadas vías.
“Realmente desde la mañana hemos estado desalojando, lo que no hemos utilizado son las bombas lacrimógenas, aunque no lo descartamos, esperamos que cese esto después del mediodía”, expuso.
”Si se agota el diálogo, la Constitución y los protocolos de la Policía ya establecen ciertos procedimientos a seguir en estos casos cuando fracasa la negociación. Hay ciertos niveles establecidos por las Naciones UNidas sobre el uso de la fuerza”, señaló.
El jerarca policial detalló que tampoco se descarta el decomiso de las unidades participantes, las cuales serían llevadas a plantes policiales, así como sanciones económicas para los propietarios.
Caos vehicular
Un sector del transporte público de Honduras paralizó este jueves sus labores en las principales ciudades y carreteras del país, aduciendo sus directivos que el Gobierno que preside Xiomara Castro no atiende sus demandas, entre ellas un aumento a la tarifa por servicio.
Los transportistas del servicio urbano, taxis y mototaxis exigen además una rebaja a los combustibles y un subsidio para todo el sector.
También señalan que sufren los efectos de la extorsión de pandillas que les cobran un “impuesto de guerra”, lo que ha derivado, desde hace varios años, en la decena de muertes violentas de conductores por negarse a esa exigencia.
Uno de los directivos del transporte público, Wilmer Cálix, dijo que la creación de una comisión anunciada por el Gobierno “es una táctica dilatoria” y advirtió que, si no les buscan una solución, la protesta será “por tiempo indefinido”.
En Tegucigalpa, los manifestantes bloquearon las salidas hacia el oriental departamento de Olancho, el norte y centro del país, además de algunos puntos de mucho tráfico en la ciudad como bulevares.
La autopista que comunica las ciudades de Tegucigalpa, en el centro del país, con San Pedro Sula, norte (las dos más importantes del país), fue bloqueada en sus dos carriles de venida a la altura de la central ciudad de Comayagua.
Los bloqueos comenzaron a eso de las 5:00 am, luego de que los directivos del transporte no lograron que los recibiera la presidenta Xiomara Castro. Los transportistas dicen que no quieren reunirse con una comitiva del Gobierno porque han venido demorando la búsqueda de un acuerdo que les favorezca.
Esperan una respuesta hoy
La protesta, que afecta a todo tipo de transporte, incluso el privado, se mantenía hasta el mediodía en las entradas y salidas de la mayoría de las principales ciudades de Honduras, en los cuatro puntos cardinales.
El transporte interurbano también ha sido afectado debido a que algunas empresas de las principales ciudades decidieron no movilizar sus autobuses por los bloqueos en las carreteras.
Miles de personas que se conducían en taxis, autobuses urbanos e interurbanos tuvieron que caminar largas distancias para llegar a su destino. Los transportistas esperan que entre hoy y mañana la presidenta hondureña los reciba y les tenga una respuesta favorable.
El comisionado del Instituto Hondureño del Transporte Terrestre (IHTT), Rafael Barahona, dijo que la protesta “es injusta” y que no es cierto que el Gobierno pretenda dilatar la búsqueda de una solución a los problemas que plantean los transportistas.
Agregó que el Gobierno creo mesas de trabajo que han venido trabajando en las últimas dos semanas y que para hoy está prevista una “reunión de alto nivel en la Casa Presidencial”.
Barahona recordó que en lo que respecta a los combustibles, el Gobierno autorizó en marzo una sustancial rebaja al diésel y la gasolina, a lo que los transportistas han respondido que esa rebaja no ha sido favorable porque el coste de los derivados del petróleo este año ha sufrido un incremento todas las semanas. Apuntó que también ha subido el coste de los neumáticos y repuestos, y la gente viaja menos por los problemas económicos que vive el país.
Según el comisionado del IHTT, el Gobierno tiene “varios escenarios económicos que se pueden construir con las diferentes modalidades del transporte”.
