San Pedro Sula, Honduras.
El pequeño Léster Emanuel, de 6 años, llegó a Nutre Hogar a través del desaparecido Instituto Hondureño de la Niñez y la Familia (Ihnfa) cuando apenas tenía nueve meses de nacido, en un estado de desnutrición severo que lo mantenía con ceguera.
Pesaba apenas seis libras, cuando lo ideal para esa edad es entre 19 y 21 libras.
Gracias al amor y atenciones que el personal del centro le proporcionó desde el primer momento, Léster ha logrado desarrollarse y ser un niño que juega y se divierte pese a las dificultades en su salud.
Consecuencia de no tener una alimentación adecuada desde su nacimiento, el menor tiene problemas de audición y de habla. Como la historia de Léster hay muchas; sin embargo, Nutre Hogar ha sido una esperanza para cientos de criaturas.
Necesidades
Ante las enormes deficiencias de alimentación el centro construyó un espacio con capacidad para albergar a 100 niños, pero con ello también crecieron las necesidades.
Con un costo operativo mensual superior a los 550 mil lempiras, requiere del apoyo de instituciones y personas naturales para un correcto funcionamiento.
Nutre Hogar requiere de alimentos, leche, frutas, verduras. Además ropa en buen estado para los infantes.
El 20 de enero de 2004 la fundación abre sus puertas por una iniciativa de monseñor Rómulo Emiliani, quien ya tenía un proyecto similar en Panamá.
Comienza en una vivienda de la colonia La Mora de San Pedro Sula, siendo la primera beneficiada una niña llamada Deisy Milla.
En 2006 se trasladan a una casa en Las Colinas, Choloma, donde actualmente dan apoyo a 26 niños que permanecen en el lugar y 50 que reciben ayuda ambulatoria.
Gabriela Montes, niñera del hogar, dijo que atienden a preescolares de cinco meses a cinco años, afectados por la desnutrición.
Alejandra Moradel, vicepresidenta de la fundación, apela a la solidaridad de los hondureño para que aporten su granito de arena, pues atraviesan un momento económico difícil.
El pequeño Léster Emanuel, de 6 años, llegó a Nutre Hogar a través del desaparecido Instituto Hondureño de la Niñez y la Familia (Ihnfa) cuando apenas tenía nueve meses de nacido, en un estado de desnutrición severo que lo mantenía con ceguera.
| Cómo ayuda
Puede ser un voluntario, un donante de víveres o un aportante en las cuentas: 021-101-53881 Ficohsa o 21-008-002194-8 Banpaís.
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Gracias al amor y atenciones que el personal del centro le proporcionó desde el primer momento, Léster ha logrado desarrollarse y ser un niño que juega y se divierte pese a las dificultades en su salud.
| Nutre Hogar dispone de enfermeras y un médico voluntario que dan asistencia especilizada a los infantes.
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Necesidades
Ante las enormes deficiencias de alimentación el centro construyó un espacio con capacidad para albergar a 100 niños, pero con ello también crecieron las necesidades.
Con un costo operativo mensual superior a los 550 mil lempiras, requiere del apoyo de instituciones y personas naturales para un correcto funcionamiento.
| Por medio de juegos aprenden a desarrollar habilidades.
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El 20 de enero de 2004 la fundación abre sus puertas por una iniciativa de monseñor Rómulo Emiliani, quien ya tenía un proyecto similar en Panamá.
Comienza en una vivienda de la colonia La Mora de San Pedro Sula, siendo la primera beneficiada una niña llamada Deisy Milla.
| El área de cunas tiene capacidad para 100 pequeños.
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Gabriela Montes, niñera del hogar, dijo que atienden a preescolares de cinco meses a cinco años, afectados por la desnutrición.
Alejandra Moradel, vicepresidenta de la fundación, apela a la solidaridad de los hondureño para que aporten su granito de arena, pues atraviesan un momento económico difícil.
| También hay un espacio donde reciben formación educativa.
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