Salvador Nasralla, candidato presidencial del Partido Liberal, brindó este lunes una declaración luego de que The Wall Street Journal divulgara un reportaje que, según dijo, expone información “sumamente grave para la estabilidad democrática” del país.
El artículo del medio estadounidense describe un presunto modelo de manipulación política impulsado por el régimen de Nicolás Maduro, basado en colectivos, milicias y operadores entrenados para intervenir en procesos electorales de la región.
De acuerdo con el análisis citado por Nasralla, esas advertencias incluyen actividades que buscarían incidir en la contienda hondureña programada para el 30 de noviembre.
A ese señalamiento se suma –según el candidato– un comunicado oficial del Departamento de Estado de los Estados Unidos, que acusa a altos funcionarios vinculados al régimen venezolano de operar estructuras criminales transnacionales asociadas a hechos de violencia y desestabilización regional.
Frente a este escenario, Nasralla afirmó que su posición no responde a interpretaciones personales, sino a “señalamientos documentados” que, aseguró, obligan a fijar una postura clara frente al país. En ese sentido, presentó cinco puntos fundamentales que —dijo— marcarán su línea política como aspirante presidencial.
El primero de ellos establece que Honduras “no está con Venezuela, ni lo estará con ningún régimen ilegítimo”. Nasralla rechazó cualquier acción de injerencia, financiamiento o manipulación proveniente del gobierno de Maduro, a quien afirmó no reconocer como presidente de Venezuela. Según sostuvo, ese régimen “destruyó su economía, su democracia y sus instituciones”, un camino que —aseguró— Honduras no debe replicar.
"No tendrá vínculos con el régimen venezolano"
El aspirante liberal también remarcó que su proyecto político no tiene ni tendrá vínculos con estructuras criminales relacionadas con el régimen venezolano. Se describió como una opción “de manos limpias, transparente y comprometida con la ley”, en contraste con lo que considera amenazas externas a la estabilidad nacional.
Entre las decisiones que promete adoptar en caso de llegar a la Presidencia, Nasralla aseguró que Honduras romperá relaciones con el régimen de Maduro y solo restablecerá vínculos cuando exista en Venezuela un gobierno electo libremente y reconocido por la comunidad democrática internacional.
Asimismo, afirmó que defenderá al país “de cualquier amenaza interna o externa”, haciendo un llamado a resguardar a las familias, las instituciones y el proceso electoral frente a agendas extranjeras que —dijo— pretendan dividir o manipular a la ciudadanía.
Nasralla concluyó señalando que Honduras “no volverá al pasado corrupto ni continuará con más de lo mismo”, al tiempo que reiteró que su propuesta es “seria, técnica y honesta”, y que se presenta como “la única esperanza limpia para que Honduras renazca”.