Tegucigalpa, Honduras.
El crimen organizado reclutó fiscales del Ministerio Público que posiblemente colaboraron en los asesinatos de sus colegas.
La aseveración es del asesor presidencial Marvin Ponce, el mismo que reveló a inicios de octubre que hay 35 narcoalcaldes en Honduras.
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“Me refiero a que desde adentro (del Ministerio Público), los grupos de algunos fiscales, vinculados con el crimen organizado, pudieron haber hecho atentados contra sus mismos compañeros, tal vez porque les estorbaban, tal vez porque conocían sus fechorías y también al crimen organizado, la Policía misma, que usted sabe que incluso ni la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial ha hecho nada por depurarla”.
“En la Fiscalía, en la última inspección que hizo la junta interventora se detectó que había una gran cantidad de fiscales ligados a bandas del crimen organizado, las cuales operaban desde el Ministerio Público, aliados con policías, aliados con jueces y que no se descarta que algunos fiscales pudieron haber sido atacados desde sus mismas trincheras donde trabajan porque la impunidad que operó en el marco de golpe de Estado y posgolpe de Estado fue fuerte”, sostuvo Ponce.
Desde julio de 2013 se conoció este informe de la comisión interventora del MP, pero no trascendió más.
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Sobre si hay o hubo fiscales ligados al crimen o con familiares ligados al crimen organizado que pudieron participar en crímenes como el del abogado Orlan Chávez, de la Fiscalía Especial contra el Crimen Organizado, o en el del exdirector de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN) Julián Arístides Gonzáles, el asesor presidencial replicó que desde adentro hay fiscales que pasaron la prueba del polígrafo admitiendo sus nexos con el crimen organizado.
Una publicación del periódico mexicano La Jornada, de junio de 2010, atribuida al entonces ministro de Seguridad Óscar Álvarez, informó que la muerte de Gonzales podría haber sido ordenada por el cartel de Sinaloa.
