Tegucigalpa, Honduras.
Pantallas de radio LCD y GPS, asientos eléctricos, sistemas de aire acondicionado automático, bolsas de aire, luces halógenas y turbo intercooler que permite una aceleración de 0 a 100 kilómetros en 12.4 segundos, son algunos de los lujos que disfrutaban los altos funcionarios en los carros que tuvieron que entregar para ser subastados.
Un informe preliminar sobre este proyecto gubernamental que servirá como medida de ahorro para reducir el gasto corriente, recoge el gusto y apego de la mayoría de funcionarios públicos por los vehículos más opulentos del mercado hondureño. El documento establece que los servidores públicos son fanáticos de los vehículos marca Toyota, particularmente, los modelo Land Cruiser, Prado y Runner, cuyo valor puede llegar a superar el millón de lempiras en la versión más reciente.
En el informe se aprecia que la mayoría de instituciones de gobierno puso a disposición de Finanzas más de alguna camioneta marca Toyota, como el caso de Copeco, la Secretaría de Cultura Arte y Deportes, el Instituto Hondureño de Turismo, Agricultura y Ganadería, Educación, Sanaa, Salud, Banhprovi, Defensa, Industria y Comercio, entre otras.
El gobierno inició el pasado 28 de julio un proceso de recuperación de 655 vehículos de lujo del Estado que serán puestos a la venta a través de una subasta pública en octubre próximo.
El documento preliminar de los carros de lujo del Estado deja al descubierto el interés de algunos funcionarios por los carros europeos de alto rendimiento y calidad como el caso de la marca Land Rover. El documento señala que pese al costoso mantenimiento de este tipo de automotores, varias instituciones de gobierno mantenían en su flota vehicular este tipo de vehículos, particularmente los modelos Discovery, Defender y Freelander.
Los carros siguen siendo recibidos a paso lento en virtud de que varias instituciones del Estado se han rehusado a despojarse de estos automotores adquiridos con recursos del Estado.
Pantallas de radio LCD y GPS, asientos eléctricos, sistemas de aire acondicionado automático, bolsas de aire, luces halógenas y turbo intercooler que permite una aceleración de 0 a 100 kilómetros en 12.4 segundos, son algunos de los lujos que disfrutaban los altos funcionarios en los carros que tuvieron que entregar para ser subastados.
Un informe preliminar sobre este proyecto gubernamental que servirá como medida de ahorro para reducir el gasto corriente, recoge el gusto y apego de la mayoría de funcionarios públicos por los vehículos más opulentos del mercado hondureño. El documento establece que los servidores públicos son fanáticos de los vehículos marca Toyota, particularmente, los modelo Land Cruiser, Prado y Runner, cuyo valor puede llegar a superar el millón de lempiras en la versión más reciente.
En el informe se aprecia que la mayoría de instituciones de gobierno puso a disposición de Finanzas más de alguna camioneta marca Toyota, como el caso de Copeco, la Secretaría de Cultura Arte y Deportes, el Instituto Hondureño de Turismo, Agricultura y Ganadería, Educación, Sanaa, Salud, Banhprovi, Defensa, Industria y Comercio, entre otras.
El gobierno inició el pasado 28 de julio un proceso de recuperación de 655 vehículos de lujo del Estado que serán puestos a la venta a través de una subasta pública en octubre próximo.
El documento preliminar de los carros de lujo del Estado deja al descubierto el interés de algunos funcionarios por los carros europeos de alto rendimiento y calidad como el caso de la marca Land Rover. El documento señala que pese al costoso mantenimiento de este tipo de automotores, varias instituciones de gobierno mantenían en su flota vehicular este tipo de vehículos, particularmente los modelos Discovery, Defender y Freelander.
Los carros siguen siendo recibidos a paso lento en virtud de que varias instituciones del Estado se han rehusado a despojarse de estos automotores adquiridos con recursos del Estado.