20/04/2024
01:38 AM

“Es injusto lo que estamos viviendo, mi familia está en shock”

El diputado de Libre relata la pesadilla que han vivido después que desconocidos le mancharon y tirotearon su casa.

Redacción

El exfutbolista y ahora diputado al Congreso Nacional, Wilmer Cruz, reaccionó molesto y preocupado ayer después de que un grupo de desconocidos mancharon y tirotearon su casa de habitación en Santa Cruz de Yojoa.

Cruz relató que el miércoles en horas de la noche personas supuestamente militantes del partido Libre pasaron frente a su casa y estando su familia en el interior hicieron varios disparos que impactaron en la vivienda, por suerte su familia resultó ilesa. “Traidor”, se leía en uno de los mensajes que escribieron en las paredes de la casa.

El congresista no duda que el ataque es una consecuencia del conflicto político en el que salieron electos dos presidentes del Congreso Nacional, Jorge Cálix, del partido Libertad y Refundación, y Luis Redondo, del Partido Salvador de Honduras. El diputado fue de los que decidió no respetar el acuerdo entre la ahora presidenta Xiomara Castro y Salvador Nasralla, que consistía en que el presidente del Congreso sería del Partido Salvador de Honduras y al momento de la elección Wilmer votó por Jorge Cálix, lo que le costó que lo expulsaran del partido y la presidenta Xiomara Castro los calificara como traidor a él y al resto de los 17 de los 50 diputados de Libre que no respetaron el mencionado pacto.

“Nunca quise estar en política, pero cuando me dieron la posibilidad de ser candidato de Libre acepté, me entusiasmé mucho por la idea que tenía doña Xiomara, que iba a ser un gobierno distinto; sin embargo, nunca esperé que esto iba a llegar a los extremos solamente por pensar diferente, por darle el voto a Jorge Cálix, que es de mi mismo partido y es el presidente del Congreso nombrado por la mayoría de diputados. A la gente no le gustó que le diera el voto a una persona de mi mismo partido, de ahí vienen todos esos problemas que acarreamos algunos diputados que estamos en Tegucigalpa escondidos porque no tenemos otra opción”.

Luego añadió: “No es justo que estemos viendo este tipo de situaciones porque siempre hemos sido personas de bien. Afortunadamente no salió herido nadie de la familia, lo material se recupera”. Contó que después del hecho por seguridad tuvo que sacar a su familia de la casa. “Mi familia está triste y sorprendida, pero ya la tengo en un lugar seguro”.

El exportero de la Selección Nacional confiesa que nunca pensó que al ingresar a la política iba a ser perseguido. “Luché casi año y medio en política, gasté mis últimos centavos que tenía para lograr el objetivo, saqué 197 mil votos que la gente me dio para pensar diferente a los demás, no para ir al Congreso a agachar la cabeza y decir sí a todo. Lo primero que hice fue en poner en balanza a los dos candidatos, analicé bien, tomé la decisión y de ahí vino el problema porque la decisión que tomé no es de la mayoría”.

¿La polarización le está ganando a la democracia?

“Siempre ha sido así, pero eso no me va a doblegar. Cuando llegamos personas que pensamos diferente tenemos problemas, pero tengo mi carácter, no me dejo manipular por nadie, precisamente eso me llevó al triunfo. Tomo mis determinaciones y las deben respetar como respeto la de los demás”.

Dice que no es quién para juzgar, prefiere dejarlo todo en manos de Dios. “Pero lo que hicieron no es correcto. Mi familia y yo estamos bloqueados”. El político reconoce que está pasando un mal momento. “Con tal no me dañen el corazón no pasa nada. Me he topado con esta situación solo por ser diferente a los demás. Sigo firme a lo que nosotros queremos, no me harán cambiar nunca. No le daré el voto a otra persona que no pertenece a mi partido. Toda la campaña trabajé por Libre y en la recta final no votaré por una persona que no pertenece a mi partido. No se lo daré a una persona que no sacó ni el 25 por ciento de los votos que logró Jorge Cálix”.

¿Se arrepiente de haber ingresado a la política?
“Sí, me arrepiento, solo terminaré estos cuatro años y esto se acaba, ya comencé y lo tengo que terminar, pero mi familia no se merece esto”.

El carácter que le forjó el fútbol le ayudará a transitar firme en lo que quiere. “Se maneja el tema que vamos a pedir asilo los diputados, pero eso dañará al país, principalmente al gobierno. Tenemos que actuar con madurez, pero sí estamos pensando, analizando un asilo, veremos qué dicen los abogados que nos representa porque mi familia está en shock”.

Sobre la situación de sus compañeros disidentes que no votaron por Redondo, Wilmer comentó: “Todos estamos juntos, los 17, en una montaña donde no puede llegar nadie. A todos nos han dañado algo; las casas, los carros, la paz que teníamos se rompió, esperamos que esta situación llegue a un término feliz”.

Reconoce que él y sus compañeros diputados temen por su vida. “Es lógico, hay mucha gente inmadura, sin embargo, de ha poquito se darán cuenta cómo está el tema político, que nosotros queremos lo mejor para el país, sabiendo que el poder no se lo podemos dar a cualquier persona y sí a alguien que le ha costado el partido y toda la vida ha sido mano derecha de los Zelaya. Queremos darle una seguridad a nuestra presidenta que el Congreso será dirigido por una persona de su confianza”. Calificó como una ligereza de la presidenta Xiomara Castro la decisión de expulsarlos del partido y calificarlos de traidores. “La gente me conoce, saben que no soy traidor, me conocieron en mi vida como jugador y entrenador, di lo mejor. La gente cree mucho en la presidenta y se volcó a hacernos daño a nosotros”.

No duda que el Congreso legal electo es el de Jorge Cálix. “Los traidores no somos nosotros, son otros. El Congreso electo legalmente es el de Jorge Cálix, no es necesario ni ir a la escuela para darse cuenta de eso. Cálix recibió 79 votos de los 128 diputados propietarios, lo que pasa que hay gente que tiene sed de venganza y quiere quedarse en el poder a la fuerza”. No tiene miedo salir a la calle, pero para evitar problemas mejor no lo hace, “no es bueno tirársela de héroe”. Luego dijo: “El pecado de nosotros fue no votar por el candidato de la presidenta, ella se comprometió con Redondo y quiso llevarnos a que todos votáramos por él”.

¿Cuál es la salida a este problema?

“El diálogo, si tenemos que dejar los puestos que nos han dado pues los dejamos, pero lo importante es que el país no puede seguir así. Si a mí me dicen, Wilmer, esta cuestión se va a arreglar si renuncias, pues renuncio. Nosotros estamos dispuestos a dialogar, el que no quiere hacerlo es ese señor Redondo”.

Sobre el sentir y pensar del presidente del Congreso, comentó: “Jorge Cálix está bien, desea que esta situación se solucione para beneficio del país, él es Libre de corazón y le duele lo que está sucediendo. Es un tipo con madurez, de diálogo, responsable, tiene muchas aspiraciones, sabe que ahora está en la presidencia del Congreso, pero que en los próximos años aspira a la presidencia del país”.

Para cerrar, Wilmer Cruz dejó claro que no cree que la constituyente sea la salida al conflicto político, pero “sí creo que la tercería podría ser una opción, hay que buscarle forma, de manera que el país no salga perjudicado”.

Casa de Wilmer Cruz.