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Hondureños acuden masivamente a los cementerios a recordar a muertos

  • 02 noviembre 2015 /

La mayor afluencia de hondureños se concentra en el Cementerio General de Tegucigalpa.

Tegucigalpa, Honduras

Miles de hondureños han acudido hoy masivamente a los cementerios para recordar a sus muertos en su día, mientras que otros lo hicieron el domingo, cuando se conmemoró el dedicado a los niños fallecidos.

'Desde hace cinco años vamos a la tumba de nuestra madre, le llevamos flores y recordamos el esfuerzo que hizo sola para educarnos', comentó a Efe Daysi Fonseca, cuando se dirigía a un cementerio privado de Tegucigalpa.

Daysi, de 27 años, iba acompañada por su hermano Daniel y un sobrino, todos residentes en Tegucigalpa.

'Nuestra madre nos enseñó a ser solidarios y ayudar a los demás', indicó Daniel, quien trabaja en un taller de mecánica de la capital hondureña.

En Tegucigalpa, la mayor afluencia de hondureños se concentra en el Cementerio General, público, en el que ya no hay cupo para más muertos y descansan reconocidas figuras como expresidentes de la República y otras que tuvieron protagonismo en la vida del país en el siglo pasado.

La afluencia a los cementerios también ha sido masiva en ciudades del interior del país, según informes de medios locales.

Los hondureños no olvidaron a sus familiares fallecidos.
En algunas regiones de Honduras, muchas familias no visitan a sus muertos desde hace 17 años porque los cementerios fueron destruidos total o parcialmente por el huracán Mitch, que azotó al país entre la última semana de octubre y la primera de noviembre de 1998.

En el municipio de Pespire, en el departamento sureño de Choluteca, las aguas arrastraron varias tumbas del cementerio local, mientras que el vecino pueblo de Morolica desapareció totalmente a causa del peor desastre natural que ha sufrido el país en toda su historia.

Para muchos hondureños pobres, la muerte de un familiar representa un problema mayor por los altos costes de todo lo que implica su entierro, comenzando por el ataúd, por lo que abundan los casos de parientes que buscan ayuda en instituciones públicas.