Llorando de impotencia y tristeza, Domingo Martínez agradece a Dios por estar con vida junto con su familia, pero clama por ayuda porque perdió todo.
Tenía una pequeña pulpería donde vivía junto con su familia en el caserío San Juan Marule de Gualcince, Lempira. La familia fue sorprendida por un alud de tierra y quedaron soterrados, pero lograron salir con vida con golpes y magulladuras. En ese caserío hay cuatro viviendas más en riesgo, pues las lluvias están haciendo de las suyas.
Don Domingo la está pasando difícil porque perdió todo. En los municipios del sur de Lempira, la historia vuelve a repetirse como cada invierno. Ante ese panorama, los municipios que conforman el Consejo Intermunicipal Cafeg de la Región Sur Oriente del Departamento de Lempira: Erandique, Santa Cruz, San Andrés, San Francisco, Gualcince, Candelaria y Piraera declararon emergencia en sus municipios.
Informan que las lluvias, vientos y actividad eléctrica están causando estragos en las vías de comunicación, dejando sin acceso a la población para el abastecimiento de productos de primera necesidad.
La zona está registrando derrumbes, deslizamientos, crecida de los caudales de ríos y quebradas y caídas de árboles con riesgo de daños a viviendas y las vidas de las personas.
El alcalde de Erandique, Rudy Trejo, expresó que los cultivos de granos básicos están dañados, lo cual amenaza la seguridad alimentaria y nutricional de la población de los municipios.
“Estamos preocupados porque la situación se complica en toda la zona, ya no solo con el mal estado de las calles, sino que los cultivos y el riesgo de las personas”.
El problema del pésimo estado de las calles es desde San Juan, en Intibucá, hasta Virginia, Lempira, pasando por todos los municipios de la mancomunidad. Deydin Mendoza, alcalde de Piraera, aseguró que todo el municipio está incomunicado y están buscando cómo sacar en caso de emergencia a mujeres embarazadas que necesitan atención porque aldeas como Santa Cruz en ese municipio se quedaron sin calle porque desapareció por las lluvias.
Arnulfo Rodríguez, alcalde de La Virtud, Lempira, alertó que las calles de acceso siguen siendo un verdadero problema, incomunicando caseríos y aldeas.
