El sector privado de la zona norte pide se esclarezca y se deduzcan responsabilidades por las anomalías presentadas durante las elecciones primarias en Honduras.
El atraso en la llegada de maletas electorales que causó que los centros de votación abrieran varias horas después de lo estipulado y que se extendieran los horarios de votación hasta altas horas de la noche, especialmente en la capital, es para los empresarios “algo nunca antes visto”, pero sobre todo indignante y reprochable.
Karim Qubain, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), felicitó a la población, ya “que, a pesar de los atrasos injustificados y sospechosos, se movilizó para votar y esperó hasta altas horas de la noche y madrugada para ejercer su derecho. Los ciudadanos salvaron este proceso electoral”.
Qubain señaló que los responsables de los atrasos en la entrega del material electoral, que impidieron la apertura de centros de votación claves en San Pedro Sula y Tegucigalpa, deben ser investigados y rendir cuentas por los daños causados.
“Exigimos a las autoridades competentes para que garanticen desde ya el orden y la transparencia en las elecciones generales. No podemos permitir que nuestra democracia se ponga en riesgo, como ocurrió en este proceso primario. Todos debemos estar vigilantes desde ahora para asegurar que las elecciones generales sean un proceso ordenado y respetuoso del derecho de la ciudadanía a elegir”, expresó Qubain a La Prensa.
Luis Larach, expresidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), compartió que este proceso electoral dejó mucho que desear, calificándolo de algo “nunca vivido antes en la historia democrática de Honduras”.
Larach pidió analizar la existencia de las Fuerzas Armadas. “Van dos períodos, el pasado y este, donde no han cumplido sus funciones constitucionales, garantizar la alternabilidad del poder y velar por llevar elecciones democráticas en orden, resguardando las urnas y el proceso completo, funciones mandadas por la Constitución, las cuales son indelegables, a pesar de eso el pueblo se manifestó estoicamente”, puntualizó Larach.
José Martín Chicas, empresario industrial, declaró que es necesario cuidar la democracia, y el electorado la cuidó con esmero al acudir a los centros de votación, pese a los atrasos de los que no fueron responsables.
“Ahora esperamos lo más importante, la transparencia, porque la gente observa los procesos. Hay muchas lecciones aprendidas, yo no había visto un proceso con anormalidades como hubo aquí, por lo menos aquí en Cortés, San Pedro Sula”, destacó Chicas.
El economista Rafael Delgado explicó que el proceso electoral, cuyo costo es de más de L2,000 millones, es demasiado caro para presentar este tipo de anomalías que algunos señalan como “deliberados”.
“En primer lugar, el Consejo Nacional Electoral y las Fuerzas Armadas, a ellos hay primero que apuntar, y los órganos competentes deben investigar qué hay detrás. Aún faltan las elecciones generales, que son más complejas y más delicadas”, indicó Delgado.