16/04/2024
07:25 AM

EEUU investigaba a Tony Hernández desde 2004

  • 27 noviembre 2018 /

Hernández fue acusado de importar cocaína a Estados Unidos, por uso y posesión de ametralladoras y dispositivos destructivos y por dar declaraciones falsas a agentes federales.

Tegucigalpa, Honduras

Geoffrey S. Berman, fiscal de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York, y Raymond Donovan, el agente especial a cargo de la División de Operaciones Especiales de la Administración de Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA), anunciaron ayer que Juan Antonio Hernández Alvarado (Tony Hernández) es acusado en el Tribunal Federal de Manhattan de conspirar para importar cocaína a los Estados Unidos, por delitos relacionados con el uso y posesión de ametralladoras y dispositivos destructivos, así como de hacer declaraciones falsas a agentes federales.

50,000
dólares recibió de soborno en una reunión que según la acusación tuvo con Devis Leonel Rivera Maradiaga, quien hizo un video de esa reunión.

Estos delitos lo arriesgan a condenas que van desde cinco años de prisión a cadena perpetua.

El caso está asignado al Juez de Distrito P. Kevin Castel, quien seguirá el proceso que en contra del hermano del presidente Juan Orlando Hernández ha iniciado tras su arresto el pasado el 23 de noviembre en Miami.

El exdiputado Juan Antonio Hernández representó a Lempira en el Congreso Nacional.

La acusación

De acuerdo con el comunicado de la Fiscalía de Nueva York, desde el año 2004 hasta 2016, Estados Unidos investigó al excongresista. Durante esos 12 años (cuatro Gobiernos) le siguieron la pista para identificar las actividades vinculadas al narcotráfico.

Según los acusadores, varias organizaciones de tráfico de drogas en Honduras y en otros lugares, han trabajado juntas “con el apoyo de ciertos individuos públicos y privados prominentes, incluidos políticos hondureños y funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, para recibir cargas de cocaína de varias toneladas enviadas a Honduras desde, entre otros lugares, Colombia a través de rutas aéreas y marítimas, y para transportar las drogas desde el oeste en Honduras hacia la frontera con Guatemala y eventualmente a los Estados Unidos”.

Cuatro
cargos contra Hernández son los que acredita la acusación que ayer oficialmente el juez de Distrito P. Kevin Castel oficializó en una audiencia contra el exdiputado Juan Antonio Hernández Alvarado.

Para protegerse de la interferencia oficial y para facilitar el paso seguro a través de Honduras de cargas de cientos de cientos de kilogramos de cocaína, los narcotraficantes pagaron sobornos a funcionarios públicos, incluidos algunos miembros del Congreso Nacional de Honduras.

El fiscal federal de Manhattan, Geoffrey S. Berman, dijo que “el excongresista hondureño Tony Hernández estuvo involucrado en todas las etapas del tráfico a través de Honduras de cargas de cocaína de varias toneladas que estaban destinadas a los Estados Unidos”.

“Eran embarques, donde sobornó a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley para obtener información sensible para proteger los envíos de drogas, y solicitó grandes sobornos a los principales traficantes de drogas”. Hernández está ahora bajo custodia en territorio estadounidense y se enfrenta a la justicia, destacó Berman.

Mientra el agente especial a cargo Raymond Donovan dijo que “el tráfico de drogas y la corrupción en todo el mundo amenazan el Estado de derecho, alimentan la violencia y la inestabilidad, y dañan a las familias y comunidades inocentes. Hernández y sus asociados criminales supuestamente conspiraron con algunas de las redes criminales transnacionales más mortales y peligrosas del mundo en México y Colombia para inundar las calles de Estados Unidos con drogas mortales. La DEA espera que Hernández se enfrente a la justicia estadounidense y responda por sus presuntos delitos”.

Los cuatro cargos

1. Tráfico de drogas
Conspirar para importar cocaína a los Estados Unidos. La condena puede ser de 10 años de prisión a cadena perpetua

2. Posesión de armas
Posesión de armas y dispositivos destructivos. La condena por este delito puede ser de 30 años.

3. Conspiración
Conspiración para usar y portar ametralladoras y dispositivos destructivos para promover la conspiración de importación de cocaína. La condena puede ser cadena perpetua.

4. FALSO TESTIMONIO
Declaraciones falsas a agentes federales. Condena de 5 años.

A gran escala

Tony Hernández, refiere el comunicado emitido por la Corte del Distrito Sur de Nueva York, “es un exmiembro del Congreso Nacional de Honduras, hermano del actual presidente de Honduras y un narcotraficante a gran escala que trabajó con otros narcotraficantes en, entre otros lugares, Colombia, Honduras y México, para importar cocaína en los Estados Unidos”.

Según el documento, Hernández estuvo involucrado en el procesamiento, recepción, transporte y distribución de cargas de múltiples toneladas de cocaína que llegaron a Honduras a través de aviones, buques rápidos y, en al menos una ocasión, un submarino. La investigación refiere que el exdiputado incluso tuvo acceso a laboratorios de cocaína en Honduras y Colombia, en los que parte de la cocaína estaba marcada con el símbolo TH, las iniciales de Tony Hernández.

El amplio documento de 12 páginas, adonde se formaliza la acusación de Juan Antonio Hernández, refiere que fue él quien también coordinó y, en ocasiones, participó en proporcionar seguridad fuertemente armada para los envíos de cocaína transportados dentro de Honduras e incluso por miembros de la Policía Nacional de Honduras y narcotraficantes con armas livianas y ametralladoras.

“Sobornaron a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley para obtener información sensible para proteger los envíos de drogas y solicitaron grandes sobornos a los principales narcotraficantes de Hernández” refiere el documento.

Reunión con el Cachiro

La acusación además documenta una reunión que tuvo Tony Hernández en febrero de 2014, en Honduras, adonde se reunió con Devis Leonel Rivera Maradiaga, exlíder de una violenta organización de narcotraficantes hondureña conocida como los Cachiros, donde según consta en la acusación fue una reunión organizada por, entre otros, un exmiembro de la Policía Nacional de Honduras.

“Durante una parte grabada en video y en audio de esa reunión, Hernández acordó ayudar a Rivera Maradiaga para hacer que las entidades del Gobierno hondureño pagaran el dinero que se les debe a una o más compañías de lavado de dinero de los Cachiros a cambio de pagos ilícitos de Rivera Maradiaga. Rivera Maradiaga pagó a Hernández aproximadamente $50,000 durante la reunión”, refiere la acusación.

El proceso para Tony Hernández se inicia y sus abogados preparan la defensa en su caso por los cuatro cargos que ha formulado la Fiscalía.

Foto: La Prensa

Falso testimonio hunde a Tony Hernández
Fue el 25 de octubre de 2016 que Tony Hernández llegó a Estados Unidos para conocer sobre las acusaciones que en su contra se habían formulado.

En la acusación se revela que “realizó afirmaciones y representaciones materialmente falsas, ficticias y fraudulentas durante una entrevista con representantes de la Agencia para la Administración de Control de Drogas de los EUA en relación con una investigación que se llevó a cabo en el Distrito Sur de Nueva York”.

Hernández Alvarado, aseguran, dio declaraciones falsas en relación con la conducta criminal que se expresa en el cargo tres de la acusación, donde dijo que “nunca aceptó dinero de los narcotraficantes y que nunca dio asistencia de ninguna manera, a sabiendas que mentía intencionalmente”.

La investigación se realizó en el Distrito Sur de Nueva York, adonde dio las declaraciones.

Son 12 páginas las que contienen la acusación contra Juan Antonio Hernández, el documento detalla cómo desde 2004 se iniciaron las investigaciones en su contra y donde refiere que a gran escala traficó droga. Tony Hernández se involucró en todo el curso de procesamiento y tráfico de la cocaína desde Colombia a Estados Unidos.