Tegucigalpa, Honduras.
Jaime Antonio Suárez, de 78 años, fue trasladado a la Penitenciaría Nacional de Támara luego de que el Juzgado de Criminalidad Organizada, Medioambiente y Corrupción ordenara su detención judicial.
Suárez, acusado de participar en el Caso Pandora, fue extraditado desde El Salvador el lunes y enfrentará su audiencia inicial el 28 de febrero a las 8:30 a.m.
El exapoderado legal de Dibattista y Fundación Todos Somos Honduras está vinculado al desvío de más de 282 millones de lempiras de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), fondos que, según la Unidad Fiscal Especializada en Redes de Corrupción (Uferco), fueron utilizados para financiar campañas del Partido Nacional, Partido Liberal y FAPER en las elecciones de 2013.
Se le imputan los delitos de fraude, uso de documentos falsos, malversación de caudales públicos y lavado de activos.
Pese a su edad, Suárez no logró obtener medidas cautelares debido a su historial como prófugo de la justicia. “Recordemos que él estaba prófugo. Por eso consideran que no está bien que lo dejen con otras medidas”, explicó Bárbara Castillo, portavoz de los juzgados.
Captura
La captura de Suárez ocurrió en El Salvador el 27 de marzo de 2023, tras activarse una alerta roja de Interpol en su contra. Su extradición se autorizó el 10 de febrero de 2025, meses después de que su hijo, Luis Fernando Suárez, también vinculado al caso, fuera entregado a Honduras en julio de 2024.
Según las investigaciones, los fondos desviados de la SAG debían destinarse a proyectos agropecuarios, agroindustriales y hortícolas en beneficio de madres jóvenes de varios departamentos del país, incluyendo Francisco Morazán, La Paz, Choluteca, El Paraíso, Ocotepeque, Valle, Intibucá, Gracias a Dios y Comayagua.
Sin embargo, estos recursos fueron utilizados para otros fines, lo que dio origen a una de las investigaciones de corrupción más grandes de los últimos años en Honduras.
