El ministro de Finanzas, Wilfredo Cerrato, calificó este miércoles de “increíble” 'la inconciencia de algunos empresarios, que aprovechando el ajuste del tres por ciento al Impuesto Sobre la Renta (ISR) han subido el precio a sus productos a casi 50 por ciento'.
“Estoy seguro y he hablado con el ministro de Industria y Comercio, Adonis Lavaire para que su personal ejerza mayor control y evitar esos abusos”, explicó Cerrato.
Solo el Congreso Nacional puede autorizar la prorroga de la vigencia de la Ley de Ordenamiento de las Finanzas Públicas, Control de las Exoneraciones y Medidas Antievasión, afirmó Cerrato.
Sobre la “vacatio legis”, que es una suspensión temporal de la entrada en vigor de la ley, que se ha pedido, explicó que esa medida fue solicitada por la titular de la DEI, Miriam Guzmán, y la presidenta del COHEP, Aline Flores, quienes pidieron un espacio de entre cuatro y cinco días para ajustar el sistema con los nuevos precios.
En cuanto al control en los negocios o empresas que captan el ISV, que muchos no enteran, señaló que se deben hacer muchas mejoras en la DEI y empezar con ese problema, ante la necesidad del Estado de atender programas sociales y de seguridad.
Agregó que en lo relacionado a la eliminación de las exoneraciones, recoge el criterio generalizado de que los que más tienen deben tributar y que se han encontrado casos donde empresas nunca han tributado al fisco y eso no es justo.
Refirió que hay productos que debieron pagar impuestos, pero nunca lo han hecho y hoy dicen que el aumento es del 15 por ciento y no es así, siempre debieron pagar el 12 por ciento y no lo hacían. Asimismo señaló que la economía y las finanzas del país, deben manejarse con transparencia, y son los funcionarios públicos quienes deben dar el ejemplo, controlar el gasto y cuando se comiencen a ver resultados, se deben enfocar a la gente que menos tiene.
Agregó que de ese tres por ciento que se ha incrementado al ISV, según el cálculo, es el valor comprometido para programas sociales y cada vez que la gente pague ese tributo, debe recordar a los que menos tienen quienes son beneficiados con programas como el Bono 10 Mil cuyo número de favorecidos se piensa ampliar con esos recursos.
Cerrato recordó que el país viene de una crisis heredada de un gobierno anterior, que tenía un gasto de deuda pública de unos siete mil millones de lempiras y que este año el gobierno debió pagar 19 mil millones de lempiras, más de dos veces de lo que ellos pagaban.
“Cuando en ese gobierno existía ese margen libre en caja, que no había mucha deuda, no se hicieron muchas cosas, al contrario se comenzaron a endeudar a corto plazo y es lo que se está pagando y eso es una gran presión”, argumentó.
Refirió que el gobierno del presidente Porfirio Lobo, recibió una deuda flotante de 15 mil millones de lempiras, y en 2012 cuando él asumió como ministro de Finanzas, la misma era de 12 mil millones de lempiras.
“Fueron meses duros, de huelgas a diario y no se cumplían los pagos, este año no hubo huelgas por falta de pago”, destacó.
Detalló que para 2014 hay que pagar 29 mil millones de lempiras entre capital e intereses, 10 mil millones más que lo que se pagó en 2013, pero se logró salir con los compromisos y el gobierno cumplió con el pago de salarios, deuda a proveedores, sin recurrir a préstamo alguno con el Banco Central de Honduras (BCH).