Hoy, 28 de febrero, se cumple un año de la trágica colisión entre dos autobuses en San Juan de Opoa, Copán, que resultó en la muerte de al menos 19 personas, incluyendo niños, adultos, mujeres y jóvenes.
El accidente ocurrió alrededor de las 6:30 a.m. en la carretera CA-11A, que conecta Santa Rosa de Copán con Gracias, Lempira.
Uno de los autobuses, que regresaba de dejar migrantes en la frontera con Guatemala, invadió el carril contrario en una curva, chocando frontalmente con un microbús de pasajeros que cubría la ruta Lepaera-Santa Rosa de Copán.
El impacto fue tan violento que ambos vehículos quedaron incrustados, dejando a la mayoría de los pasajeros del microbús fallecidos en el lugar.
Además de las víctimas mortales, otras 12 personas resultaron gravemente heridas.
Ayudante del conductor
Tras el accidente, se descubrió que el ayudante del conductor estaba al volante del autobús que provocó la colisión, lo que llevó a la detención del propietario del vehículo.
En este día, los familiares de las víctimas se reúnen para rendir homenaje a sus seres queridos en el lugar del accidente.
Con una emotiva caravana, los dolientes recuerdan a quienes perdieron la vida, adornando el sitio con cruces en memoria de los fallecidos.
La conmemoración refleja el dolor y la lucha de las familias por mantener viva la memoria de aquellos que partieron de manera tan abrupta.
