Desplazamientos forzados, robos y enfrentamientos han marcado a las comunidades de Quebrada de Arena y Quebrada de Agua, en Tocoa, departamento de Colón, durante los últimos seis meses, como consecuencia del conflicto agrario que persiste en la zona.
La Policía Nacional ha identificado a la banda denominada Los Cachos, integrada por unas quince personas y liderada por Juan Carlos Lizama Escalante, como la responsable de los recientes disturbios en el Bajo Aguán.
De acuerdo con las autoridades, esta organización es señalada de haber desplazado de manera violenta a unas 480 familias pertenecientes a las cooperativas Tranvío, Camarones y El Chile, todas aglutinadas en la Plataforma Agraria.
Según datos proporcionados por los campesinos, solamente en la cooperativa Camarones, la banda se habría apoderado de unas 655 hectáreas de fincas de palma africana en plena producción.
"En las otras cooperativas también varias familias fueron desplazadas por la banda de Los Cachos, pero la policía hizo acto de presencia y ellos se retiraron y los compañeros recuperaron las fincas", manifestó Johnny Rivas a diario LA PRENSA, portavoz de la Plataforma Agraria.
La Fiscalía del Ministerio Público ha presentado requerimiento fiscal contra quince personas identificadas como miembros de Los Cachos. Hasta ahora, las autoridades reportan la captura de Juan Carlos Lizama Escalante, su hermana Mileny Lizama y Pedro Flores, quienes ya guardan prisión preventiva.
Además, se detuvo a una cuarta persona cuyo nombre no fue revelado por la Policía; se encuentra recluida en el centro penal de Trujillo, acusada de asesinato.
Audiencia contra el lder de la banda
Este lunes comenzó la audiencia inicial contra Lizama Escalante en los Tribunales de San Pedro Sula. Según el informe policial, el detenido tiene antecedentes delictivos y contaba con una orden de captura por desplazamiento forzado y asociación ilícita.
"Las familias desplazadas han perdido unos 40 millones de lempiras por parte de esta banda, debido a robos. Se robaron unas ocho motocicletas, treinta bestias molares, ocho carretas para acarrear la fruta y todas las herramientas de trabajo que estaban en bodega", recordó Rivas.
Agregó que también fue saqueada la tienda de consumo de la cooperativa El Chile, valorada en 1.8 millones de lempiras, además de la producción que no pudieron cosechar. "Todo eso supera los 40 millones de lempiras", enfatizó.
En el marco de la audiencia, cientos de familias integrantes de la Plataforma Agraria se congregaron ayer lunes en las afueras de los juzgados de San Pedro Sula.
"Nos hemos venido a manifestar a los juzgados porque necesitamos que el juez aplique justicia y pueda haber prisión para estos detenidos. Asimismo, la captura de los otros que están en libertad y que representan un peligro", puntualizó Johnny Rivas.
Fuertes enfrentamientos
La última semana de febrero fue una de las más tensas en el Bajo Aguán, cuando se registraron acciones violentas contra familias de las cooperativas Tranvío y El Chile, en un intento por desalojarlas de sus tierras.
Miembros de la Policía Nacional intervinieron, desatándose un enfrentamiento con Los Cachos, quienes repelieron con piedras, palos, bombas molotov y disparos, dejando como resultado varios agentes policiales heridos.
ETIQUETA DE TRANSPARENCIA: Este artículo ha sido corregido y optimizado con una herramienta de inteligencia artificial bajo la supervisión y aprobación editorial.