La movilización nacional de oración convocada por la Conferencia Episcopal de Honduras y la Confraternidad Evangélica para el próximo 16 de agosto ha comenzado a trascender las fronteras nacionales, al recibir respaldo de organismos religiosos de alto nivel como el Vaticano y el Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam).
Ambas instituciones celebraron el gesto inédito de unidad entre católicos y evangélicos, destacando su enfoque espiritual, pacífico y no partidario. El Celam, a través de su plataforma ADN Celam, subrayó que la iniciativa representa un acto colectivo a favor de la democracia, la paz y el respeto a la familia hondureña.
“La caminata no tiene fines políticos. Es un llamado ético y espiritual dirigido a toda la ciudadanía para actuar con conciencia frente a los retos del país”, expresó el organismo que agrupa a las conferencias episcopales de América Latina y el Caribe.
Un día antes, el Vaticano también se pronunció sobre el evento a través de Vatican News, calificándolo como una expresión de fe y compromiso social. Ambas publicaciones confirman la atención que sectores religiosos internacionales están prestando al contexto político y social de Honduras, de cara a las elecciones generales del próximo 30 de noviembre.
Caminata de oración por Honduras: Unidos en la fe, esperanza y amor por la patriahttps://t.co/ny5UyQqkwo
— Vatican News (@vaticannews_es) July 21, 2025
Un gesto de fe por encima de las diferencias
La caminata se realizará bajo el lema “Caminamos con fe y esperanza en Honduras”, y busca convocar a miles de creyentes de distintas denominaciones para orar por la nación. Monseñor José Vicente Nácher, arzobispo de Tegucigalpa y presidente de la Conferencia Episcopal, y el pastor Gerardo Irías, presidente de la Confraternidad Evangélica, realizaron la convocatoria conjunta durante una conferencia de prensa.
Ambos líderes remarcaron que la iniciativa no contempla participación de políticos ni uso de símbolos partidarios. “La única bandera será la de Honduras”, indicaron, reforzando el carácter apolítico del evento. Además, extendieron la invitación a todos los sectores sociales, incluyendo aspirantes a cargos públicos, siempre que participen sin proselitismo.
Mes de la familia y llamado a la conciencia
Los organizadores propusieron que agosto sea considerado simbólicamente como el “mes de las familias”, y que la caminata sea una ocasión para reflexionar sobre el rumbo de la nación, desde el respeto mutuo, la convivencia y el fortalecimiento de la institucionalidad.
En medio de un clima marcado por tensiones políticas y desconfianza electoral, las iglesias hondureñas han remarcado la necesidad de salvaguardar la voluntad popular como expresión legítima de la soberanía ciudadana.
“Como creyentes, no contamos con grandes medios, pero tenemos la fe, la oración y la presencia de Dios”, sostuvieron.