TEGUCIGALPA.
Medidas. En la sala de pediatría del Hospital Escuela se concentra el 76% de los internos por dengue. Son niños, la mayoría menores de 10 años que sufren el embate de la enfermedad. Se han distribuido los pabellones para atender a los menores.
De casa en casa en tareas de prevención, la Secretaría de Salud, a través de las regiones metropolitanas, trabaja en el control vectorial del dengue.
Las tareas se enfocan en prevención, en colocar larvicidas para pilas y barriles, en trabajos de destrucción de criaderos y la fumigación.
Pese a esas acciones, falta mucho por hacer. La prevención es una tarea compartida con la población, la cual también a cuentagotas se va sumando para erradicar el zancudo transmisor del dengue.
En Tegucigalpa están identificadas las zonas de mayor incidencia, como La Nueva Capital, Carrizal No. 2, Las Ayestas, Cerro Grande, Arturo Quezada, Hato de Enmedio, los alrededores de la Nueva Suyapa, Tizatillo y una parte de la colonia Kennedy. Esas son las zonas de epidemia hacia donde dirigen la atención las autoridades.
“El análisis de la semana epidemiológica 30 nos muestra que se acumulan 7,506 casos de dengue no grave. Solo en la capital hay tres muertes con sospecha de dengue. Una fue en la semana 22, un menor de la colonia Arturo Quezada; en la semana 29 se reportó otro menor de siete años que ingresó a una clínica privada de El Progreso, Yoro, y fue trasladado a la capital, pero falleció en el hospital San Felipe. El jueves murió otro menor de la colonia Las Ayestas”, detalló Harry Bock, jefe de la Región Metropolitana del Distrito Central.
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Solo Tegucigalpa cuenta con 255,000 viviendas, de las cuales el 60% están siendo intervenidas con cuatro máquinas para fumigar. El otro 40% son peatonales y callejones y en esas zonas se interviene con máquinas termonebulizadoras. En la capital solo se cuenta con 14 máquinas de la Región de Salud, 17 de la alcaldía y siete de Idecoas.
Desde ayer las operaciones se concentran en la colonia Cerro Grande, la Nueva Capital y Arturo Quezada.
Realidad. Datos de la Metropolitana del Distrito Central revelan que son cuatro semanas de epidemia, que la carga viral está presente y que las acciones de prevención son claves para que la situación no se complique, especialmente porque solo en el Distrito Central hay 1.5 millones de habitantes fijos y 600,000 de población flotante.
“En la semana 26 estuvimos en línea de seguridad, pero llegó lo que temíamos: la carga viral. El virus está circulando y el que circula es el serotipo 2, que es el más agresivo, por lo tanto, esa es la incidencia de casos que tenemos”, dijo Bock.
Pero el reflejo de cómo el dengue golpea a la población se observa en los centros de salud, cliper y hospitales.
Ayer el centro de salud Alonzo Suazo estaba abarrotado. Se prioriza la atención para aquellos pacientes que presentan cuadros febriles, y se ha habilitado una ventanilla especial para agilizar los expedientes, la atención en preclínica, monitoreo y observación de cada paciente.
En los casos que los pacientes pueden colapsar son remitidos de inmediato al Hospital Escuela; pero también se habilitan desde el fin de semana seis salas más, una de ellas en el Alonso Suazo que tendrá una capacidad para 30 personas, 10 para menores, 10 para mujeres y 10 para hombres.
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Son 1,500 casos más que en la semana número 29 Estadísticas de Salud revelan que la fase crítica se agudiza y las semanas 31, 32, 33 serán las de mayor incidencia.
Prioridad se da a pacientes con síntomas de dengue Habilitan ventanillas especiales y atención para los pacientes que presentan cuadros febriles y se les monitorea.
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La buena noticia ahora es que las madres están llevando de inmediato a los niños para ser tratados y esto da lugar a que no colapsen y que en cuatro días se puedan recuperar.
“Se está atendiendo a los pacientes que presentan los síntomas del dengue. Hay un monitoreo permanente y se trabaja también para que médicos de hospitales regionales que remiten los pacientes a este hospital puedan dar la atención necesaria e inmediata en sus localidades. Hay médicos distribuidos en Olancho, Choluteca, La Paz, Comayagua y El Paraíso, capacitando al personal para que atiendan en sus centros. De esta manera se atiende de inmediato y se descongestiona el hospital”. informó Laura Schoenherr, vocera del Hospital Escuela.
Raymunda Hernández viajó de La Venta del Sur, ella vigila a su sobrina de 16 años que pasó un cuadro crítico por el dengue.
Lleva tres noches sin dormir y ahora recobra esperanzas, pues su sobrina va mejorando.
“Tenía dolencias y gran fiebre. La trajimos de inmediato, le bajaron las plaquetas; pero gracias a Dios se va recuperando. Esta es una lección porque debemos atacar el dengue”, expresó.
