Tegucigalpa, Honduras
No solo los capitalinos que reciben directamente el servicio del Sanaa sufrirán por la escasez de agua, también los que se abastecen con las juntas de agua.
Cerca de 170 juntas de agua que hay en la capital sufrirán severas modificaciones en el calendario de entrega a partir de este mes de febrero.
El cambio en el calendario de entrega que anunció el Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (Sanaa) afectará también a las personas que se abastecen mediante esta forma de distribución.
Carlos Hernández, director de la Región Metropolitana del Sanaa, explicó que las juntas de agua deciden cuándo y en qué tiempo distribuyen el agua en sus barrios y colonias, ya que ellos elaboran sus calendarios.
“Habrá modificaciones, les reduciremos tres horas el suministro de agua en cada entrega, ellos hacen sus cálculos para garantizar la distribución a las personas”, argumentó Hernández.
Richard Salinas, representante de las Juntas de Agua del Distrito Central, confirmó la escasez de líquido en los siete sectores en los que ellos la distribuyen el vital líquido.
“Donde hay una junta de agua ya existe un racionamiento, no recibimos ni el tiempo ni la cantidad que los que se abastecen directamente del Sanaa”, explicó Salinas.
El representante comentó que hay colonias que reciben el líquido cada 15 días en un lapso de 40 minutos a una hora, por lo que la situación siempre ha sido complicada.
Salinas indicó que los siete sectores y los alrededores que tendrán modificaciones son El Carrizal, Mogote 1 y 2, Los Pinos, colonias de la carretera al sur y el norte, Reparto por Arriba y las aldeas.
“Todos los sectores aledaños a estos puntos y que reciben agua mediante juntas recibirán menos tiempo y en un lapso más tardado el suministro”, explicó el representante.
Citó el ejemplo de la colonia Brisas del Norte donde las personas podían obtener el líquido dos veces por semana, y ahora con el nuevo calendario solo lo recibirán una vez.
“Es una situación clara, al haber un déficit en la recolección, no hay otra opción que trasladárselo a los abonados de las juntas”, argumentó Salinas.
Las modificaciones son generales y las personas que se abastecen de El Picacho son las más afectadas
