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En bordo se refugiaba la mamá de la expalillona Ilsa Molina

  • 07 marzo 2018 /

Ilsa Damaris Aguirre fue capturada en el bordo atrás de residencial El Pedregal, de San Pedro Sula. La acusan de testaferrato.

    Tegucigalpa, Honduras.

    La hondureña Ilsa Damaris Aguirre, implicada en el millonario desfalco en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), fue detenida ayer en un bordo de San Pedro Sula, donde se refugiaba, informó el Ministerio Público.

    Aguirre, quien estaba prófuga desde agosto de 2015, fue detenida por elementos de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) en el bordo atrás de residencial El Pedregal, de San Pedro Sula. Ella es requerida por la justicia hondureña por el “delito de testaferrato”, señaló el Ministerio Público.

    La mujer es madre de la exmodelo hondureña Ilsa Vanessa Molina, condenada a finales de diciembre de 2016 a más de 12 años de prisión por blanquear 421,052 dólares del Seguro Social a través de una empresa falsa con la que firmó contratos de suministros de productos médicos que nunca llegaron a la institución.

    La exmodelo, según el Ministerio Público, mantuvo una “ relación sentimental” con el exjefe de compras del Seguro Social José Zelaya, quien tiene orden de captura y está en paradero desconocido. Zelaya es considerado el cerebro del descalabro del IHSS. Producto de esta relación nació una niña.

    La hondureña fue detenida en junio de 2016 tras llegar deportada a San Pedro Sula de Estados Unidos, país adonde estuvo detenida por más de un año por entrar ilegalmente.

    Por este caso guarda prisión el último director del Seguro Social, Mario Zelaya, quien está detenido en una unidad militar cercana a Tegucigalpa con otros exfuncionarios acusados del millonario saqueo.

    Audiencia

    La señora Ilsa Damaris Aguirre comparecerá hoy a las 8:00 am a la audiencia de declaración de imputado ante un juez de letras penal con jurisdicción nacional. Las investigaciones de la Unidad de Apoyo Fiscal (Unaf) del Ministerio Público indican que la imputada compró una casa valorada en 2.5 millones de lempiras con dinero que la expalillona le dio y que adquirió mediante la malversación de fondos del IHSS.

    En su momento, la imputada aseguró que se sentía amenazada y hasta acudió ante el Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Conadeh) a solicitar auxilio. También había comentado que pediría la protección de la Embajada de Estados Unidos para su nieta, solicitud de la que no se supo más.