Quimistán, Santa Bárbara, Honduras.
Para inversionistas y el Gobierno de Honduras construir la represa hidroeléctrica de El Tablón representa múltiples beneficios; pero para los habitantes de la aldea La Ceibita, de Quimistán, esta obra es algo que los llena de incertidumbre, pues tendrán que buscar otro lugar para vivir.
El reciente anuncio del Gobierno hondureño sobre el próximo inicio de la licitación de la obra fue bien visto por los inversionistas interesados en ejecutar el proyecto; pero preocupó a los vecinos de La Ceibita, quienes se quejan porque según ellos no se les mantiene al tanto de estas decisiones y exigen que se les dé una solución para trasladarse a otra zona.
La inversión para hacer el proyecto de El Tablón será de unos 3,768 millones de lempiras (unos 166 millones de dólares) y una vez construida logrará generar unos 20 megavatios, además de propiciar la oportunidad de crear varios nuevos empleos para la región y terminar con el fantasma de las inundaciones en el Valle de Sula.
El empresario Alberto Bográn dijo que es necesario impulsar el proyecto por todos los beneficios que significará para la zona norte e incluso el país.
“En marzo de 2015 se hizo el lanzamiento de El Tablón y ahora ya estamos a la espera de que salgan las licitaciones. Esperamos que este mismo año sea una realidad no solo adjudicar el proyecto, sino el inicio de la construcción de la obra. Como sector privado estamos interesados en que eso pase”, aseguró.
Bográn afirmó que quienes apoyan el proyecto buscan la protección del Valle de Sula, pues según dijo, El Tablón evitará inundaciones, dará seguridad alimentaria y producirá energía.
“Dentro del Plan de Nación ya se levantó a nivel de prioridad nacional el proyecto de El Tablón. Urge que se acelere el paso, el Gobierno ha mostrado la voluntad para impulsar el proyecto y eso es bueno”, indicó.
El empresario reveló que la licitación estaría a cargo de la unidad ejecutora que es la misma de la Cuenta del Milenio.
Además Bográn dijo que hay varias compañías que van a participar en la licitación para construir la represa.
“Nos gustaría que este proyecto lo hicieran inversionistas nacionales. Trabajaremos para lograr eso, porque los hondureños también podemos hacer grandes obras”, expresó el empresario.
La Ceibita
Al anunciar el lanzamiento del proyecto El Tablón, el Gobierno dijo que el 5 de marzo comenzaría la reubicación de las personas que viven en esa zona de El Tablón. Sin embargo, los habitantes de la aldea La Ceibita, incluyendo los miembros del patronato, indicaron que nadie ha hablado con ellos y que de hecho solo se enteran de lo que pasa en el proyecto por lo que publican los medios de comunicación.
Los vecinos de la zona, quienes deberán irse a vivir a otra zona cuando se haga el proyecto, dicen que no se oponen a la obra, pero que antes les deben dar soluciones para no quedar en la calle.
“Tenemos toda una vida de estar aquí y ahora dicen que harán la represa de El Tablón; pero les recordamos que antes de iniciar cualquier proyecto en esta zona tienen que darnos una respuesta para saber adónde vamos a vivir, porque aquí los propios estudios de la obra han dejado claro que no nos podremos quedar cuando hagan la represa”, dijo Manuel Enrique Flores, miembro del patronato de la aldea La Ceibita.
Agregó que “tras ver las noticias, nosotros tenemos que andar buscando que nos cuenten qué pasa con la obra; pero a nosotros no nos han tenido en cuenta hasta ahora. Se supone que pronto tendremos una reunión con las autoridades del Gobierno para que nos hablen del tema”, declaró Flores.
Juan Pablo Echeverría, miembro de la junta de agua de La Ceibita, se mostró preocupado porque aún nadie les dice qué pasará con la aldea.
“No tenemos información del proyecto y eso es preocupante, porque nadie nos dice si nos van a reubicar, si nos comprarán los terrenos o nos van a indemnizar. Yo nací aquí y queremos que el Gobierno nos dé garantía de que las familias que vivimos en este lugar no quedaremos sin casa”, manifestó Echeverría.
Un largo camino
Esta historia, de ensueño arquitectónico y pesadilla comunitaria, inició en 1974, hace 42 años, cuando por primera vez se consideró la idea de construir una represa hidroeléctrica llamada El Tablón en el municipio de Quimistán, la cual aprovecharía el caudal del río Chamelecón. Al embalse, hasta ahora solo imaginario, se le puso su nombre debido a que se construirá cerca de la aldea llamada El Tablón.
Pero varios Gobiernos han pasado, y aunque innumerables veces se ha hablado de que se comenzará a construir la obra, una y otra vez todo quedó en reuniones y promesas, pero nada se concretó.
Sin embargo, el mes pasado, el Gobierno hondureño dio un paso definitivo para comenzar con el proyecto al anunciar que el 23 de mayo comenzará la licitación para que en noviembre de este año se adjudique finalmente el proyecto de la represa hidroeléctrica El Tablón.
El propio presidente hondureño Juan Orlando Hernández tiene previsto que la obra comenzará a ser construida en 2017. Según indicaron varios habitantes de La Ceibita, estarían dispuestos a ser reubicados a la zona de la comunidad de El Tablón, que también es parte del municipio de Quimistán, Santa Bárbara.
Para inversionistas y el Gobierno de Honduras construir la represa hidroeléctrica de El Tablón representa múltiples beneficios; pero para los habitantes de la aldea La Ceibita, de Quimistán, esta obra es algo que los llena de incertidumbre, pues tendrán que buscar otro lugar para vivir.
El reciente anuncio del Gobierno hondureño sobre el próximo inicio de la licitación de la obra fue bien visto por los inversionistas interesados en ejecutar el proyecto; pero preocupó a los vecinos de La Ceibita, quienes se quejan porque según ellos no se les mantiene al tanto de estas decisiones y exigen que se les dé una solución para trasladarse a otra zona.
La inversión para hacer el proyecto de El Tablón será de unos 3,768 millones de lempiras (unos 166 millones de dólares) y una vez construida logrará generar unos 20 megavatios, además de propiciar la oportunidad de crear varios nuevos empleos para la región y terminar con el fantasma de las inundaciones en el Valle de Sula.
El empresario Alberto Bográn dijo que es necesario impulsar el proyecto por todos los beneficios que significará para la zona norte e incluso el país.
“En marzo de 2015 se hizo el lanzamiento de El Tablón y ahora ya estamos a la espera de que salgan las licitaciones. Esperamos que este mismo año sea una realidad no solo adjudicar el proyecto, sino el inicio de la construcción de la obra. Como sector privado estamos interesados en que eso pase”, aseguró.
Bográn afirmó que quienes apoyan el proyecto buscan la protección del Valle de Sula, pues según dijo, El Tablón evitará inundaciones, dará seguridad alimentaria y producirá energía.
“Dentro del Plan de Nación ya se levantó a nivel de prioridad nacional el proyecto de El Tablón. Urge que se acelere el paso, el Gobierno ha mostrado la voluntad para impulsar el proyecto y eso es bueno”, indicó.
El empresario reveló que la licitación estaría a cargo de la unidad ejecutora que es la misma de la Cuenta del Milenio.
Además Bográn dijo que hay varias compañías que van a participar en la licitación para construir la represa.
“Nos gustaría que este proyecto lo hicieran inversionistas nacionales. Trabajaremos para lograr eso, porque los hondureños también podemos hacer grandes obras”, expresó el empresario.
La Ceibita
Al anunciar el lanzamiento del proyecto El Tablón, el Gobierno dijo que el 5 de marzo comenzaría la reubicación de las personas que viven en esa zona de El Tablón. Sin embargo, los habitantes de la aldea La Ceibita, incluyendo los miembros del patronato, indicaron que nadie ha hablado con ellos y que de hecho solo se enteran de lo que pasa en el proyecto por lo que publican los medios de comunicación.
Los vecinos de la zona, quienes deberán irse a vivir a otra zona cuando se haga el proyecto, dicen que no se oponen a la obra, pero que antes les deben dar soluciones para no quedar en la calle.
“Tenemos toda una vida de estar aquí y ahora dicen que harán la represa de El Tablón; pero les recordamos que antes de iniciar cualquier proyecto en esta zona tienen que darnos una respuesta para saber adónde vamos a vivir, porque aquí los propios estudios de la obra han dejado claro que no nos podremos quedar cuando hagan la represa”, dijo Manuel Enrique Flores, miembro del patronato de la aldea La Ceibita.
Agregó que “tras ver las noticias, nosotros tenemos que andar buscando que nos cuenten qué pasa con la obra; pero a nosotros no nos han tenido en cuenta hasta ahora. Se supone que pronto tendremos una reunión con las autoridades del Gobierno para que nos hablen del tema”, declaró Flores.
Juan Pablo Echeverría, miembro de la junta de agua de La Ceibita, se mostró preocupado porque aún nadie les dice qué pasará con la aldea.
“No tenemos información del proyecto y eso es preocupante, porque nadie nos dice si nos van a reubicar, si nos comprarán los terrenos o nos van a indemnizar. Yo nací aquí y queremos que el Gobierno nos dé garantía de que las familias que vivimos en este lugar no quedaremos sin casa”, manifestó Echeverría.
Un largo camino
Esta historia, de ensueño arquitectónico y pesadilla comunitaria, inició en 1974, hace 42 años, cuando por primera vez se consideró la idea de construir una represa hidroeléctrica llamada El Tablón en el municipio de Quimistán, la cual aprovecharía el caudal del río Chamelecón. Al embalse, hasta ahora solo imaginario, se le puso su nombre debido a que se construirá cerca de la aldea llamada El Tablón.
Pero varios Gobiernos han pasado, y aunque innumerables veces se ha hablado de que se comenzará a construir la obra, una y otra vez todo quedó en reuniones y promesas, pero nada se concretó.
Sin embargo, el mes pasado, el Gobierno hondureño dio un paso definitivo para comenzar con el proyecto al anunciar que el 23 de mayo comenzará la licitación para que en noviembre de este año se adjudique finalmente el proyecto de la represa hidroeléctrica El Tablón.
El propio presidente hondureño Juan Orlando Hernández tiene previsto que la obra comenzará a ser construida en 2017. Según indicaron varios habitantes de La Ceibita, estarían dispuestos a ser reubicados a la zona de la comunidad de El Tablón, que también es parte del municipio de Quimistán, Santa Bárbara.