Durante un recital en Río de Janeiro, en el marco del Femme Fatale Tour que llevó a Britney Spears por todo el mundo, la princesa del pop se llevó una sorpresa luego de que invitara a un fanático a subir al escenario y éste le mordiera la pierna.
Britney hizo subir a un hombre a la zona del escenario para regalarle un baile erótico. Ella empezó a seducirlo y cruzó sus piernas sobre el fan, mientras que él excesivamente emocionado, le mordió la pierna en un arrebato de alegría.
La cantante se bajó del caño y comenzó a mirar a los costados, anonadada. Sin embargo, como buena artista, no dejó que la extrañeza le ganara a su talento y continuó con el tema “Lace and later” como si nada hubiese ocurrido.