Aunque los estudios Marvel han confirmado que volverán a contar con Tom Holland para las próximas películas de su universo cinematográfico que cuenten con la presencia del superhéroe arácnido, lo cierto es para el intérprete británico haber dado vida a Spider-Man en ‘No Way Home’, la tercera de su última saga de filmes, ha supuesto un punto de inflexión y el fin de una etapa que siempre recordará con mucho cariño.
Tanto el rodaje de la película como su reciente estreno en cines fueron momentos claves para el actor, ya que por entonces todavía no sabía con certeza si volvería a enfundarse en el inconfundible traje de su personaje.
Por eso no resulta sorprendente que el artista haya tenido sentimientos encontrados a lo largo de los últimos meses, una mezcla de tristeza y entusiasmo en el marco de tan intensa grabación, coprotagonizada con su ahora novia Zendaya y con su nuevo mejor amigo, Jacob Batalon.
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“Spider-Man siempre vivirá en mí. Ha sido una experiencia increíble, y el fin de la trilogía ha sido algo muy emotivo para nosotros tres. Empezamos a trabajar juntos con solo 19 años, y ahora somos los mejores amigos, una familia que se ha criado tanto dentro como fuera del universo de Spider-Man. No está aún claro qué va a pasar en el futuro, por lo que la mera posibilidad de tener que decir adiós al personaje es algo muy triste”, ha explicado Tom Holland en conversación con el diario The Sun
