Hoy, a partir de las seis de la tarde, la primera calle de la ciudad de los zorzales se vestirá de negro con la marcha de la comunidad roquera en protesta por el asesinato de Adrián Soler, uno de los seguidores más fieles de este género.
La violencia que acecha todos los días a las familias hondureñas tiñó de luto al círculo roquero hace tres semanas.
Por esta razón, los cantantes y seguidores de este estilo musical
realizarán una marcha que comenzará en la plaza Froilán Turcios, en los bajos del estadio Francisco Morazán y continuará hasta la catedral San Pedro Apóstol.
Horus, Krissis, Libélula, Khaóticos, Utopía, Esencia, Wicked y Ósmossis son algunas de las bandas que elevarán sus voces para exigirle al Gobierno una respuesta a este hecho y detener la ola de criminalidad que impera en la sociedad hondureña.
Uno de los ausentes será Alberto Martínez, baterista de Delirium y gran amigo de Soler que no podrá ser parte de la manifestación, pero sin duda su corazón acompañará a los seguidores de este género que dicen no a la injusticia.