La llegada del Año Nuevo es sinónimo de alegría, ilusión, fiesta. Los placeres gastronómicos, con su amplia variedad de recetas decembrinas, juegan un papel fundamental en esta época especial.
Si desea disfrutar sin temor a que después de una cena tenga digestiones pesadas que la lleven a pasar una mala noche o a aumentar de peso, siga algunos consejos sanos.
Para ahorrar tanto tiempo como dinero es recomendable planificar sus menús con antelación, teniendo siempre presente, justo antes de comprar, cuántos comensales acudirán al festejo y qué cantidad de alimentos va a necesitar en la elaboración.
Es importante mantener un horario habitual de comidas, cuestión que le evitará sentir más hambre de lo habitual en las comidas posteriores y, por tanto, tomar un mayor número de calorías al comer más.
Es de vital importancia comer tranquilo, relajado, disfrutando de cada plato y no excediéndonos en la cantidad de raciones.
La recomendación en este caso sería la siguiente: coma y disfrute de todo, pero con moderación. Para algunas personas es fundamental comer postres, vino, turrones o dulces típicos, no se trata de suprimir sus gustos, sino de saber controlar los excesos.
Puede sustituir comidas con muchas calorías por otras más livianas, sin olvidar las frutas de temporada y las ensaladas.
Sépalo
Economía. Es importante no excederse en los gastos innecesarios, puede ser un buen anfitrión si se organiza con tiempo.
para las visitas. En casa puede tener boquitas o vinos para atender a sus invitados, las botanas son esenciales para que lo saquen de los apuros de última hora.