25/12/2025
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Las bellas también sufren

  • Actualizado: 05 junio 2010 /

Cualquiera podría pensar que es imposible que una mujer famosa padezca maltrato de su pareja, sea esposo o novio.

Cualquiera podría pensar que es imposible que una mujer famosa padezca maltrato de su pareja, sea esposo o novio.

Sin embargo, las bellas y famosas tampoco están exentas de recibir maltrato a manos del sexo masculino. También ellas han sufrido. La lista es grande y contiene nombres conocidos, pero en algún momento han levantado la voz y puesto un alto a la agresión.

El caso más reciente es el de la presentadora boricua María Celeste Arrarás, quedenunció a su novio Raúl Quintanilla por maltrato. El denunciado pagó una fianza de 2,500 dólares y debe presentarse ante el juez el 28 de junio.

Las divas de la música no escapan de este problema. Es el caso de la bella Rihanna, que sufrió violencia doméstica de su novio Chris Brown.

Las de Hollywood también han pasado por esas amargas experiencias y aunque difícil de creer, la “Reina del Pop”, Madonna, recibió agresiones de su ex marido Sean Penn.

Tampoco la farándula latinoamericana escapa de esta situación.

Un ejemplo es el de la conocida Myrka Dellanos, que sólo cuatro meses después de haber contraído nupcias denunció a su ex esposo Ulysses Daniel Alonso por violencia doméstica.

Afecta a todas

De acuerdo con datos de la Organización de las Naciones Unidas, ONU, la violencia de género en los ámbitos familiares es mucho más frecuente de lo que parece.

De hecho, una de cada cinco mujeres ha sido víctima de violación o intento, que ocurren en su mayoría dentro de la familia directa de las víctimas.

Además, para las mujeres de entre 15 y 44 años de edad la violencia física es causa de discapacidad permanente e incluso de muerte.
Las mujeres con alto nivel económico podrían parecer intocables, sobre todo porque muchas veces son independientes y exitosas, como

Madonna o Rihanna, pero ¿por qué permiten la violencia?

“La violencia es la manera que tiene cada persona de imponer normas, puntos de vista, valores y expectativas sobre cómo debería funcionar la otra persona”, según Tania Esmeralda, especialista de la Universidad Nacional Autónoma de México, Unam.