Embarcado por la vida en el año 85 y desembocando su talento en la isla de Roatán, inicia sus primeros pasos por la vida de la música uno de los íconos de nuestro ritmo garífuna punta.
Black Sunday fue el grupo que lo vio dar sus primeros pasos, luego pasó al grupo Zamba, en el cual permaneció dos meses, dos años más estuvo con Yellow Verde, pero el grupo que lo vio crecer fue Kazzabe Agrupación.
Por malos entendidos se retiró de ese grupo y entonces llegó a La Raza, de donde se retira para formar su propia orquesta y culminar así sus sueños y proyectos de la mano de Dios.
Se trata de Israel Güity, conocido en el mundo musical como El Sheriff, a quien LA PRENSA agrega a su cartelera de talentos hondureños que han representado al país en la tarima nacional e internacional.
Conversamos con El Sheriff en medio de su gira por Estados Unidos, la cual culminará el 3 de enero de 2007.
¿Quién te ha dado el diploma de exitoso en este complicado camino?
Dios ha sido mi maestro y mi guía, por lo tanto me ha hecho acreedor de mi éxito como músico nacional.
¿Por qué tantos cambios y no poder ser constante en un solo grupo?
He tenido muchos cambios en mi vida musical, porque cuando algo no funciona decido mejor retirarme para no causar malestar ni hacer sentir mal a nadie.
¿Cuál es la mejor canción que has escrito en tu vida?
La que aún no he escrito, creo que nunca la escribiré, porque este género está evolucionado mucho.
¿De qué se habla cuando se menciona el nombre “El Sheriff”?
Cuando se habla de El Sheriff la gente sabe que es punta romántica. Son mis experiencias que las escribo para poder compartirlas en forma de canciones con el público que me ha apoyado.
¿Alguna vez has pensado retirarte de la música?
Cuando salí de La Raza me di por vencido, y me dediqué a lo mío, la electricidad, y fue cuando Dios me brindó esta bendición, venir a la gira cuando ya casi no tenía fuerzas para seguir en el campo de batalla.
¿Cómo se ve El Sheriff en cuatro años?
Me veo cantándole a Dios, porque creo que lo mejor es servirle, él es quien me ha dado la vida, el camino por donde andar y las fuerzas para seguir en esto.
¿Cómo te gustaría que te recordaran cuando te retires de los escenarios?
Como el cantante más romántico de la música punta.
¿Con quién te gustaría hacer un dúo antes de retirarte de los escenarios?
Con un artista cristiano que yo admiro mucho: Rabito.
¿Cuál fue el escenario en donde has tocado más de lo común?
En Long Island en Nueva York, en un lugar llamado “Palacio Latino”, donde siempre me he sentido bien por el público, por el ambiente y la adrenalina de mis seguidores.
¿Crees que eres un orgullo para los garífunas?
Sí, y se debe a todas las obras que he hecho en las comunidades garífunas.
¿Cuál ha sido el peor dolor de cabeza que te has llevado?
Que se hayan aprovechado de mi nobleza.
¿Cómo se puede eliminar la hipocresía que invade la industria musical nacional?
Creo que es imposible, ya que no sólo se vive a nivel nacional sino que en todo el mundo se respiran aires de hipocresía, egoísmo y envidia.
¿Cómo te defines como persona?
Soy un tipo tranquilo y sobre todo un caballero que expresa en nuestra música el amor que siente por las mujeres y la vida que nos rodea.
¿Cuál es el dolor más grande que has pasado en tu vida?
Cuando estaba entrando a un escenario y me dieron la mala noticia que mi padre, Reinaldo Güiti, había muerto
¿Qué cambiarías en la música para que fuera mejor?
Para que la música fuese mejor deberíamos ser sinceros, productores y músicos, de esa manera habría mejor química.
Frases
“Yo siento que sin mi guitarra no hay el caché
de la música punta”.
“No me gustó salir de Kazzabe porque ése fue el grupo que me dio el reconocimiento a nivel nacional e internacional”.
“Sólo dos personas de la Raza están conmigo, pero están por venirse dos o tres más, porque se sienten bien haciendo
buena música conmigo”.