Justin Baldoni afirma que Ryan Reynolds lo reprendió agresivamente en una reunión durante la realización de “It Ends With Us” (“Rompiendo el círculo”).
El director y actor presentó una demanda de 250 millones de dólares contra The New York Times el 31 de diciembre por un artículo publicado el 21 de diciembre que informaba sobre la denuncia de su coprotagonista Blake Lively, que alegaba acoso sexual y una campaña de desprestigio en represalia.
El abogado de Baldoni, Bryan Freedman, afirmó que el Times “se acobardó ante los deseos y caprichos de dos poderosas élites ‘intocables’ de Hollywood”, es decir, Lively y Reynolds, las ex coprotagonistas que se casaron en 2012. Según Freedman, el informe explosivo utilizó “textos manipulados y retocados” y que su lado tiene “todas las comunicaciones para respaldar” su versión de los hechos.
Un portavoz del Times respondió diciendo: “Nuestra historia fue reportada de manera meticulosa y responsable. Se basó en una revisión de miles de páginas de documentos originales, incluidos los mensajes de texto y correos electrónicos que citamos con precisión y en detalle en el artículo”. El medio planea defenderse “enérgicamente” contra la demanda de Baldoni.
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En su denuncia, el equipo legal de Baldoni alegó que él y algunos de los productores de It Ends With Us fueron convocados a una reunión en el apartamento de Lively y Reynolds en la ciudad de Nueva York en enero de 2024, el día antes de que se reanudara la filmación después de que terminaran las huelgas de los sindicatos de la industria.
Allí, “Reynolds se lanzó a una diatriba, reprendiendo a Baldoni en lo que Baldoni luego describió como un encuentro ‘traumático’, afirmando que ‘nunca le habían hablado así en su vida’”, alega la denuncia. Baldoni, de 40 años, afirma que Reynolds, de 48, “exigió” una disculpa para Lively, de 37 años, acusándolo de “avergonzarla por su peso”, y cuando Baldoni “se resistió a disculparse por lo que no había hecho, Reynolds se enfureció aún más”.
Sus abogados caracterizan el supuesto intercambio como un “regaño inapropiado y humillante a Baldoni, lanzado, tal vez intencionalmente, mientras otros amigos famosos entraban y salían de su ático”.
Según Baldoni, el elemento de avergonzar a Lively por su peso fue un malentendido: dice que le preguntó a un entrenador “cuánto pesaba Lively” ya que tiene “problemas de espalda” y le preocupaba lesionarse para una escena en la que su personaje levanta el peso de ella.
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El entrenador “transmitió esta información a Lively, quien luego informó a Reynolds”, lo que llevó a una “confrontación”, afirman los abogados de Baldoni. ”Lively amenazó con abandonar la producción por completo, a pesar de sus obligaciones contractuales. Lively le dio a Baldoni un ultimátum: o contrataba a otra persona o trabajaba con ella en la forma en que ella trabaja. Era su manera o la carretera”, alegan los abogados de Baldoni en la denuncia.
En su denuncia, los abogados de Lively alegaron que Baldoni “degradaba rutinariamente a la Sra. Lively al encontrar formas secretas de criticar su cuerpo y su peso”.
Cuatro meses después de dar a luz a su cuarto hijo, Lively se sintió “humillada al enterarse” de que Baldoni “llamó en secreto a su entrenador físico, sin su conocimiento ni permiso, y le dio a entender que quería que perdiera peso en dos semanas”, escribieron sus abogados.
“El Sr. Baldoni le dijo al entrenador que había preguntado porque le preocupaba tener que recoger a la Sra. Lively en una escena de la película, pero no hubo tal escena”.
