En una de sus visitas fugaces a Madrid, la cantante Isabel Pantoja aprovechó para reunirse con un grupo de amigos y pasar un rato de lo más agradable en un restaurante donde se la vio escoltada siempre por sus incondicionales.
Delgadísima y sin gota de maquillaje, la artista al natural ha dado un bajón físico que sobre el escenario apenas se nota gracias a los vestidos de lina y el buen hacer de su maquillador Juan Pedro. Pero en directo y sin bata de cola es otra historia.
Con una camiseta y su clásica cola de caballo, Isabel estuvo en el que ya es considerado el restaurante de moda en España, según ABC.es. Aunque apenas come, la cantante sí probó el gazpacho de la casa y el cotizado steak tartar.
En junio Pantoja volvió a triunfar en los escenarios de Sevilla a pesar de la condena de 24 meses por blanqueo de dinero. Tras ocho años sin actuar en la capital hispalense, la tonadillera salió al escenario vestida de amarillo y entre los vítores de más de tres mil personas que abarrotaban el Palacio de Congresos y Exposiciones de Sevilla.