La cantante Fergie, vocalista del grupo Black Eyed Peas, mostró su lado más pícaro y juguetón en la develación de su estatua de cera en el Museo Madamme Tussauds de Las Vegas, Nevada.
Al ver la flamante escultura de sí misma, la intérprete de “Big girls don’t cry” no pudo contener la alegría y comenzó a bromear con los presentes, tocando su figura mientras se reía de forma irreverente, parecía que la escultura y sus complementos, le divertían un montón.
Acompañada por su guapo esposo, el actor Josh Duhamel, la cantante vio su réplica que, por cierto, tiene atributos un poco más grandes que los de la sexi artista de carne y hueso.
“No tengo ni siquiera una muñeca, pero ahora hay una muñeca gigante mía”, dijo Fergie a Fox 5.
Según el diario Las Vegas Sun, la copia en cera de la cantante tuvo un coste 300 mil dólares.