Mariana Bayón no ha tenido una vida color de rosa. A los ocho años su hermana María Rosa murió de cáncer y seis meses después sus padres se divorciaron, convirtiéndola así en una niña prematuramente madura.
Pero hoy, el carácter perfeccionista y fuerte de esta joven de 18 años, originaria de Torreón, Coahuila, la llevó a conquistar el título de México’s Next Top Model, la primera de la versión mexicana. Ella habló con Vivir en Rosa en una amena charla.
¿Cómo empezó el año México’s Next Top Model?
Trabajando, haciendo cástines y conociendo clientes.
¿Soñaste con ser top model?
Desde muy chiquita tenía el anhelo de ser modelo y nos pusieron como jueces a personas muy experimentadas que saben de esto y que nos ayudaron. Lo mejor fue tenerlas para lograr el triunfo.
¿Cómo fue la experiencia?
Interesante. Me gustó, pero es difícil estar en un programa de televisión; aprendí muchas cosas y estoy contenta con el resultado.
¿Fueron difíciles los jueces?
Cada vez que nos parábamos frente a ellos, estaban los nervios. No fue fácil. Al final de cuentas, escuchar sus consejos fue lo que nos ayudaba.
¿Cómo era cada eliminatoria?
Pasaban tantas cosas. Eran los momentos de más nervios. Quería seguir, pero también me hubiera resignado si me eliminaban. Cuando quedé entre las dos, fue el momento en que mi cabeza dio más vueltas.
¿Qué le dices a la gente que no confió en ti?
Cada persona tenía opiniones diferentes y los jueces me escogieron. Les gustó el desempeño que tuve en la competencia y he aprendido que en la vida no se puede complacer a todos.
¿Enfrentaste obstáculos?
Mi familia siempre me ha apoyado. Los obstáculos no existen. Todo radica en la educación de cada una de las chavas. Mis padres siempre me han enseñado que la belleza física y la inteligencia van de la mano. Tengo los pies sobre la tierra. Sé lo bueno y lo malo.
¿Qué te dejó el programa?
Amistad con las chavas, Aprendí sobre fotos, pasarelas, estar con presión y muchas cosas, pero sobre todo, mucha disciplina.
¿Qué les dices a las próximas generaciones del reality?
Que si tienen en sueño, lo busquen, que se animen, es la base de todo, siempre y cuando no olviden que deben ser ellas mismas, no proyectar lo que no son.
¿Qué fue lo más difícil de dominar de tu personalidad en el programa?
He sido muy exigente conmigo misma. Yo no lloro, soy muy fuerte y perfeccionista, pero el programa me hizo darme cuenta de que soy vulnerable, que soy humana y tengo debilidades. Los expertos me hicieron darme cuenta de eso y de verdad se los agradezco.
¿Cómo serán tus próximos días?
Estoy feliz, pero tengo que trabajar y darme a conocer en el medio. Haber ganado es apenas el inicio de todo. Estoy en la edad para aprovecharme de todo y comerme el mundo de la moda.
¿Cuál es tu secreto para ser competitiva?
Nosotros vendemos belleza y me mantengo comiendo sano y con una delgadez saludable. Cada diseñador tiene un estilo de modelo. Yo me alimento bien y quiero ser una persona delgada, pero sanamente, y proyectar salud a toda las chicas que quieran seguir esta carrera.
¿Qué les dices a las chicas que no comen para estar como tú?
Una modelo anda de arriba para abajo todo el tiempo. Debes comer sano, ya sea frutas o verduras, y mantenerte bien. No es lo mismo una foto lista y publicada que la vida real. No recomiendo no comer por sólo querer ser delgada. Hay otros medios para lograr mantenerse en forma.
¿Cómo te preparas para un castin?
Yo me preparo conforme a lo que creo que buscan las agencias o diseñadores. Uno debe estar preparada y hay que tener actitud.
¿Te gustaría visitar Honduras?
Me encantaría. Adoro viajar y yo recorrería el mundo entero. Algún día iré.
¿Qué es ser bella?
Para mí la belleza exterior se acaba. Siempre mi familia me ha enseñado que los sentimientos y la forma de ser importan más que la belleza física, pero en el mundo de la moda, la belleza exterior cuenta, aún así, nunca hay que perder la esencia de cada uno.
¿Cómo es la Mariana normal?
La gente cercana a mí no me ve como la modelo. Soy una chava súper tranquila, me gusta ayudar a mis amigos, estar con ellos y me gusta el fútbol, verlo y practicarlo. Mi vida cotidiana se va entre amigos, fútbol, escuela y familia.
¿No quieres ser reina de belleza?
Siempre he querido ser modelo, pero no reina de belleza. Me lo propusieron a los 18 años, pero no acepté. Los eventos de belleza son trabajos pesados, pero a mí me gusta más la moda editorial y las revistas que ser reina de belleza. No me imagino yo en una pasarela con una corona en mi cabeza.
¿Cómo te ves dentro de 10 años?
Seguiré siendo como soy. Ya voy a estar algo grande para esto del modelaje, pero me veo dirigiendo una empresa y siendo una modelo reconocida que en mi tiempo fue buena e hizo un buen trabajo.
¿Te interesa la actuación?
Ser modelo es ser como actriz, al tomar una foto, tú debes actuar y debes proyectar algo. Me gusta, pero tendría que tomar unas clases.
Para ti, ¿en qué consiste la perfección de una mujer?
Buena actitud, ser buena persona por dentro como por fuera, ser educada y tener intelecto. El canon de belleza es diferente para cada persona y todo debe ser un conjunto de cosas.
¿Qué hacías antes de MNTM?
Yo hacía lo que cualquier chava de mi edad hace en México, viajaba y llevaba una vida relajada. Estudiaba preparatoria. Dejé los estudios por el programa, pero la educación es un factor importante.
¿Crees que la belleza y la inteligencia van de la mano?
Por supuesto. Yo jamás he puesto la belleza primero. Me gusta mucho estar siempre como la número uno y ser aplicada. La gente que piense eso está equivocada y no se ha encontrado a una mujer que tenga ambas cualidades. Me gusta leer y cultivar mi intelecto. La sabiduría y el aprendizaje van de la mano.
