Antes de hacerse con el papel de una joven adicta a las drogas en ‘Euphoria’, Chloe Cherry trabajó durante años en la industria del cine para adultos.
Esa carrera aumentó su popularidad en las redes sociales y ahí fue donde la descubrió eventualmente el creador de la serie, pero ella tuvo que pagar un precio muy alto por esa fama.
La actriz y modelo jamás le había dado importancia a su peso hasta que entró a formar parte de ese mundo, pero eventualmente acabó desarrollando un trastorno de la alimentación por la presión a la que se veía sometida.
“Todo empezó cuando un agente que tenía mientras era actriz porno me dijo: ‘Todo el mundo dice que estás gorda y la forma más rápida de perder peso es no comer’”, ha desvelado ella.
Su juventud, combinada con la falta de experiencia, hicieron que se tomara en serio sus palabras sin pensárselo dos veces: “Me lo dijo cuando tenía 18 años, y fue muy doloroso porque nadie en toda mi vida me había dicho que estaba gorda. Bajar de peso se convirtió para mí en una obsesión”.
Chloé adoptó una dieta vegana y trató de limitar la ingesta de calorías a tan solo 200 al día, lo cual le provocó una delgadez extrema.
Por suerte, llegado un punto fue incapaz de seguir ocultando a sus amigos la gravedad de su situación y escucharse decir en voz alta lo que le estaba haciendo a su cuerpo le hizo darse cuenta de que no estaba bien.
Con el paso del tiempo, Cherry acudió a profesionales de la salud mental en busca de ayuda y ahora habla sobre su experiencia siempre que se le presenta la oportunidad para compartirla con otras mujeres que puedan estar pasando por algo similar.
“Simplemente me sentía miserable, no trataba bien a mi cuerpo. Ahora que no cuento una sola caloría y como lo que quiero, mi cuerpo se ve mejor que nunca antes en toda mi vida”, explica Chloe, que ha dejado de lado todas las inseguridades respecto a su cuerpo.
“O decido sentirme bien conmigo misma o nadie más lo hará”.
