Con la crema de la música reunida en Los Ángeles y con el puertorriqueño Bad Bynny poniendo a bailar a todos, arrancó este domingo la 65ª ceremonia de los premios Grammys que galardonan a lo mejor de la industria.
La gala, animada por el comediante Trevor Noah, se celebra en la arena Crypto.com, en el centro de la ciudad californiana, y contará con presentaciones de Lizzo y Harry Styles, entre otras súperestrellas de la escena.
En esta ocasión las miradas están puestas en la estadounidense Beyoncé, que llega al frente con nueve nominaciones, y la británica Adele, con siete, una especie de tácito duelo entre el energético y bailable “Renaissance” y el introspectivo “30”.
La noche también promete para Bad Bunny quien hizo historia al ser nominado con un disco totalmente en español al álbum del año, uno de los más prestigiosos de la noche.
“Bienvenido”, lo recibió Trevor Noah en español para la presentación inaugural de la majestuosa gala.
“Yo quiero saber si los Grammys están listos para la verdadera fiesta”, disparó el reguetonero. “Ahora sí que se prende esto”, continuó antes de seguir con un popurrí de su exitoso álbum “Un verano sin ti” con el que bailó hasta Taylor Swift.
