24/11/2025
03:08 PM

Modelo Medellín, ejemplo de desarrollo socioeconómico

Inversiones público-privadas y alianzas con empresas son clave para las ciudades.

Fabio Salazar Jaramillo fue uno de los protagonistas del cambio de cara en su ciudad, creando uno de los modelos de desarrollo socioeconómicos más exitosos en América Latina.

Con ocasión de la celebración de la feria Expo Construye 2012, Salazar Jaramillo, exalcalde de la ciudad de Medellín, por mucho tiempo conocida como “la ciudad industrial de Colombia”, llegó a Honduras para exponer sobre este modelo de desarrollo que tan buenos resultados diera en una de las urbes más prominentes de la región paisa, como se conoce a esa zona colombiana.

Acompañado por una tasa de café, este exfuncionario, de actitud práctica y hablar desenfadado, explicó que uno de los puntos clave del modelo de desarrollo que ayudó a impulsar se centra en la colaboración entre la administración pública y la empresa privada en proyectos que no necesariamente implican contribuciones en metálico.

“Uno de los procesos más importantes que tiene el modelo de Medellín son las alianzas público-privadas.

Generalmente se le pide plata a los empresarios. Yo creo que los empresarios debieran pagar impuestos, pero nosotros optamos por pedirle a los empresarios conocimiento, porque el (conocimiento) que ellos tienen es muy importante para la transformación de la sociedad, en este caso, lo canalizamos especialmente al sistema educativo”, explicó el exalcalde.

En este modelo, el elemento educativo resulta un pilar sobre el cual se apoya este plan desarrollador.

“Tumbamos y construimos más de 150 edificios viejos, que era donde se educaba a los niños en los sectores populares, para hacer edificios modernos, transparentes, llenos de vidrios, con jardines, que para nosotros es lo definitivo.El cambio social está en que la gente se sienta digna”, prosiguió.

Pero el Modelo Medellín también incluye un eficiente sistema de transporte público que comprende la primera y hasta ahora única línea de metro que opera en Colombia, un sistema de buses similar al que opera en Bogotá (llamado Transmilenio), y el Metrocable, una especie de teleférico, pero con un mayor número de cabinas y una ruta que recorre un largo circuito por las zona montañosa que rodea a Medellín.

Gracias a esa novedosa oferta de transporte se logró cambiar el concepto de utilizar vehículos normales.

“Hemos construido un sistema de buses muy parecido al Transmilenio de Bogotá, con carriles exclusivos, estaciones, y hemos ido logrando un sistema público de calidad, que es la manera de desestimular el uso del vehículo particular y al mismo tiempo neutralizar ese transporte anárquico de las empresa privadas”, comenta Salazar.

Creación de espacios

El exalcalde destaca también que las iniciativas que le abren espacios a la innovación y el desarrollo en campos como la tecnología pueden producir resultados muy exitosos.

“Una de las cosas que hice en mi plan de Gobierno fue construir un proyecto llamado Ruta N, que es un edificio con todas las condiciones, que sirve para incorporar inversores en tecnología a la ciudad y la región y (así) logramos que dos empresas muy importantes escogieran ese proyecto de Medellín como centro de desarrollo estratégico: Kimberly (Clark) y Hewlett Packard.

Cuando una ciudad comienza a tener avisos de involucrarse en el desarrollo tecnológico, se vuelve un polo de atracción muy importante”.

Salazar señala que el involucramiento del sector privado, más que un asunto de caridad, es un asunto de responsabilidad.

“A los empresarios les sirve que la ciudad vaya bien, les interesa, les sirve que la ciudad vaya bien y un número importante de empresarios ha llegado a este sentido de la filantropía moderna, que no es el tema de caridad, sino de ser protagonistas del desarrollo, no solo de su empresa, sino de la ciudad”, asevera.

Salazar resume que el Modelo Medellín no es más que la recopilación de buenas prácticas, tomadas de diversas partes de América Latina, por lo que cada ciudad haría bien en tomar nota del modelo paisa para crear su propio modelo.

Y el aprendizaje no termina; “venimos aquí a copiarles algo a ustedes”, indica.