Washington, Estados Unidos.
Estados Unidos no podrá convencer a los países del Caribe de abandonar el acuerdo energético Petrocaribe con Venezuela, dijo ayer el primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves.
“EUA no podrá -a pesar de los problemas que tenemos aún con Venezuela- persuadir a los países caribeños de no participar en Petrocaribe”, expresó Gonsalves en la Organización de Estados Americanos (OEA).
El acuerdo creado en 2005 por el fallecido presidente venezolano Hugo Chávez, que suministra combustibles a 17 naciones del Caribe y Centroamérica en condiciones favorables de pago, es “evidentemente un arreglo excelente para el Caribe”.
“Es una gran contribución a nuestra situación económica”, apuntó.
A través de Petrocaribe los países obtienen años de gracia y bajos intereses para pagar y la posibilidad de intercambiar el crudo con productos agrícolas.
En la medida en que se profundizan las fallas de la economía de Venezuela, que depende exclusivamente de sus exportaciones petroleras, los países caribeños enfrentan condiciones más estrictas de pago y menores suministros, que los deja en una situación más vulnerable.
El suministro de hidrocarburos venezolanos se ha mantenido constante en “la mayoría de los países”, señaló Gonsalves.
Estados Unidos no podrá convencer a los países del Caribe de abandonar el acuerdo energético Petrocaribe con Venezuela, dijo ayer el primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves.
“EUA no podrá -a pesar de los problemas que tenemos aún con Venezuela- persuadir a los países caribeños de no participar en Petrocaribe”, expresó Gonsalves en la Organización de Estados Americanos (OEA).
El acuerdo creado en 2005 por el fallecido presidente venezolano Hugo Chávez, que suministra combustibles a 17 naciones del Caribe y Centroamérica en condiciones favorables de pago, es “evidentemente un arreglo excelente para el Caribe”.
“Es una gran contribución a nuestra situación económica”, apuntó.
A través de Petrocaribe los países obtienen años de gracia y bajos intereses para pagar y la posibilidad de intercambiar el crudo con productos agrícolas.
En la medida en que se profundizan las fallas de la economía de Venezuela, que depende exclusivamente de sus exportaciones petroleras, los países caribeños enfrentan condiciones más estrictas de pago y menores suministros, que los deja en una situación más vulnerable.
El suministro de hidrocarburos venezolanos se ha mantenido constante en “la mayoría de los países”, señaló Gonsalves.