San Pedro Sula, Honduras.
El Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos debe anunciar antes del siete de enero si renovará el TPS para los salvadoreños, cuya última prórroga vence el 8 de marzo.
El Estatuto de Protección Temporal (TPS) fue abierto para El Salvador en 2001, luego de que el país centroamericano fuera devastado por dos fuertes terremotos.
Los analistas salvadoreños descartan que habrá deportaciones masivas de parte de ese país en caso de que el Gobierno de EUA decida ya no renovar este mecanismo.
“Es muy difícil que gente que ha estado tantos años en Estados Unidos retorne a El Salvador, porque tienen un marco de estabilidad con trabajos formales”, dijo Alfonso Goitia, presidente del Colegio de Profesionales en Ciencias Económicas de El Salvador.
Actualmente, hay 195,000 salvadoreños con TPS que viven en Estados Unidos.
En promedio han vivido por 21 años en ese país, donde han formado sus familias y vidas. Además, hay 192,700 nacidos en Estados Unidos de padres salvadoreños con TPS.
Goitia destacó que esta es una población que contribuye a la economía estadounidense, pagando sus impuestos, por lo que el Congreso de ese país debe evaluar de forma positiva las condiciones para que sean ciudadanos americanos.
“Para El Salvador es necesario que se mantengan porque es una población migrante que traslada remesas al país, considerando que en 2017 superó los niveles de 2016, por lo que es un flujo importante de divisas para el país”, agregó.
Estados Unidos puso fin en noviembre al acuerdo que daba cobertura legal a los ciudadanos de Haití y Nicaragua.
Para Honduras fue prorrogado por seis meses el seis de noviembre, en espera de una decisión final del Gobierno de Trump con respecto a mantenerlo o no, y que será anunciada a más tardar el seis de mayo.
El Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos debe anunciar antes del siete de enero si renovará el TPS para los salvadoreños, cuya última prórroga vence el 8 de marzo.
El Estatuto de Protección Temporal (TPS) fue abierto para El Salvador en 2001, luego de que el país centroamericano fuera devastado por dos fuertes terremotos.
Los analistas salvadoreños descartan que habrá deportaciones masivas de parte de ese país en caso de que el Gobierno de EUA decida ya no renovar este mecanismo.
“Es muy difícil que gente que ha estado tantos años en Estados Unidos retorne a El Salvador, porque tienen un marco de estabilidad con trabajos formales”, dijo Alfonso Goitia, presidente del Colegio de Profesionales en Ciencias Económicas de El Salvador.
Actualmente, hay 195,000 salvadoreños con TPS que viven en Estados Unidos.
En promedio han vivido por 21 años en ese país, donde han formado sus familias y vidas. Además, hay 192,700 nacidos en Estados Unidos de padres salvadoreños con TPS.
Goitia destacó que esta es una población que contribuye a la economía estadounidense, pagando sus impuestos, por lo que el Congreso de ese país debe evaluar de forma positiva las condiciones para que sean ciudadanos americanos.
“Para El Salvador es necesario que se mantengan porque es una población migrante que traslada remesas al país, considerando que en 2017 superó los niveles de 2016, por lo que es un flujo importante de divisas para el país”, agregó.
Estados Unidos puso fin en noviembre al acuerdo que daba cobertura legal a los ciudadanos de Haití y Nicaragua.
Para Honduras fue prorrogado por seis meses el seis de noviembre, en espera de una decisión final del Gobierno de Trump con respecto a mantenerlo o no, y que será anunciada a más tardar el seis de mayo.
