San Pedro Sula, Honduras.
Con un flujo de capital en 2015 de $1,203.5 millones, Honduras se ubica en el cuarto lugar del pódium centroamericano en Inversión Extranjera Directa (IED).
El país es superado por Panamá, que ocupa el primer lugar con $5,213.8 millones y por Costa Rica que en 2015 registró un flujo de capital arriba de $3,094 millones, según un informe del Banco Mundial.
Con Guatemala la brecha es más corta, ya que ese país sumó el año pasado una IED de 1,209 millones de dólares, lo que representa una diferencia de $6 millones. El Salvador y Nicaragua muestran el menor índice de toda la región con flujos de capitales de $519 millones y $835 millones, respectivamente.
Un crecimiento modesto
En el caso de Honduras, aunque tuvo un avance positivo el crecimiento de $59 millones con relación ha lo reportado en 2014 que ascendió a $1,144.1 millones es calificado de “modesto e insuficiente” para lograr dinamizar la economía, según el sector empresarial. “Hay varias razones del por qué tanto la inversión extranjera como nacional no tienen el impacto deseado: la incertidumbre sobre la inseguridad jurídica, la alta carga tributaria y los engorrosos procesos para desarrollar proyectos”, manifestó Jimmy Dacarett, presidente regional en Tegucigalpa de la Asociación Nacional de Industriales (Andi). Dacarett dijo que hasta que no se logre concluir las reformas para llegar a la simplificación tributaria “no se traerá la inversión necesaria para crecer, y el capital se seguirá fugando para Guatemala y Costa Rica”.
No obstante, reconoció que hay buenos indicios de querer mejorar las condiciones para estimular la inversión, una de ellas es que el Gobierno permitió que la empresa privada hiciera su propuesta al nuevo proyecto del Código Tributario, “este proyecto será clave para la inversión”, refirió.
Wilfredo Cerrato, titular de la Secretaría de Finanzas, informó que la inversión en 2016 oscilará entre $1,261 millones a $1,300 millones.
Con un flujo de capital en 2015 de $1,203.5 millones, Honduras se ubica en el cuarto lugar del pódium centroamericano en Inversión Extranjera Directa (IED).
El país es superado por Panamá, que ocupa el primer lugar con $5,213.8 millones y por Costa Rica que en 2015 registró un flujo de capital arriba de $3,094 millones, según un informe del Banco Mundial.
Con Guatemala la brecha es más corta, ya que ese país sumó el año pasado una IED de 1,209 millones de dólares, lo que representa una diferencia de $6 millones. El Salvador y Nicaragua muestran el menor índice de toda la región con flujos de capitales de $519 millones y $835 millones, respectivamente.
Un crecimiento modesto
En el caso de Honduras, aunque tuvo un avance positivo el crecimiento de $59 millones con relación ha lo reportado en 2014 que ascendió a $1,144.1 millones es calificado de “modesto e insuficiente” para lograr dinamizar la economía, según el sector empresarial. “Hay varias razones del por qué tanto la inversión extranjera como nacional no tienen el impacto deseado: la incertidumbre sobre la inseguridad jurídica, la alta carga tributaria y los engorrosos procesos para desarrollar proyectos”, manifestó Jimmy Dacarett, presidente regional en Tegucigalpa de la Asociación Nacional de Industriales (Andi). Dacarett dijo que hasta que no se logre concluir las reformas para llegar a la simplificación tributaria “no se traerá la inversión necesaria para crecer, y el capital se seguirá fugando para Guatemala y Costa Rica”.
No obstante, reconoció que hay buenos indicios de querer mejorar las condiciones para estimular la inversión, una de ellas es que el Gobierno permitió que la empresa privada hiciera su propuesta al nuevo proyecto del Código Tributario, “este proyecto será clave para la inversión”, refirió.
Wilfredo Cerrato, titular de la Secretaría de Finanzas, informó que la inversión en 2016 oscilará entre $1,261 millones a $1,300 millones.