El entrenador uruguayo Ariel Sena, regresó esta presente temporada a Honduras tras su experiencia por Guatemala en donde consiguió un subcampeonato con el Guastatoya y hoy tiene la dura tarea de sacar adelante al Platense de Puerto Cortés.
El estratega en un viejo conocido en el balompie hondureño ya que en 1993 arribó por primera vez a suelo catracho como parte del cuerpo técnico de Líber Arispe en el Marathón, pero él mismo confirmó en declaraciones al portal charrúa Referí que se vino por equivocación ya que pensó que le hablaban sobre Holanda.
'La cohetería me voló un tímpano y la mitad del otro. Estuve un tiempo de reposo, y hacía poquito que había vuelto a trabajar cuando me llama un amigo que se tenia que venir a un equipo por dos meses', comenzó diciendo.
'Yo escuché Holanda y dije que sí enseguida, pero cuando me llamaron me hablaban en español. No entendía, pero al final me di cuenta de que yo había escuchado mal y no era Holanda sino Honduras', confesó Sena para el medio uruguayo.
Desde ese entonces el exasistente y hoy timonel ha pasado 22 años dirigiendo a instituciones chapinas y hondureñas tras esa insólita situación por la que atravesó y es uno de los más respetados por su trayectoria en la zona.
Dirigió a Marathón, Vida, Petrogela, Plantense, Universidad, Parrillas One, Villanueva y luego se fue a Guatemala, a dirigir al Deportivo Saranate y más tarde al Guastastoya. Fue allí que lideró un proceso social y deportivo que llegó al equipo de Segunda a Primera División, y en Primera lo llevó a la final del torneo nacional, que perdió.
Por último el uruguayo relató la zona conflictiva por donde estuvo todo este tiempo.' Fue una de las cosas que más le costó, pero, como todo, la capacidad de adaptación humana supera todo. Hay que tener cuidado con la seguridad, hay lugares peligrosos donde se centraliza la delincuencia, el crimen organizado', declaró.
'Pero en el día a día se reduce a que, como en cualquier lugar, tenés que tener cuidado con la zona en la que estás y con quien te relacionás. Nunca es bueno acostumbrarse a eso, pero la vas llevando', finalizó.