Luego de unos días libres que tuvieron los jugadores de la Selección Sub-23 de Honduras, varios de ellos se trasladaron a la capital y esta mañana tenían previsto su regreso a la concentración a San Pedro Sula.
La sorpresa que se llevaron los jugadores y el seleccionador Jorge Luis Pinto, fue el avión presentó un desperfecto en uno de los motores y tuvo que hacer un aterrizaje forzoso, situación que puso en pánico todos.
Gracias a Dios, los integrantes de la Selección Olímpica están fuera de peligro, solo fue un gran susto que se llevaron en el aeropuerto Toncontín.
Según la planificación del técnico Jorge Luis Pinto, luego de su llegada a la zona norte, tienen previsto entrenar esta tarde en el estadio Olímpicos a las 3:00 de la tarde.